El presidente de la Federación Gallega de Empresas Inmobiliarias (ADEIDO), Benito Iglesias, destaca que Ourense es la única provincia gallega que "no ha vendido ni ha subido la vivienda nueva", permanece con 2.825 unidades, con un 0% de variación interanual, mientras que Pontevedra ha reducido su stock en un 5,64%; A Coruña un 6,18%; y Lugo un 16,28% -la media de Galicia se sitúa en el -6,30%-, según los datos del Ministerio de Fomento. "Ourense es la única provincia que ni sube ni baja, porque se encuentra completamente paralizada, con un comportamiento plano", lamenta Benito Losada.
El presidente de Adeido señala a mayores que Ourense es "la única de las siete grandes ciudades de Galicia que no tiene un plan general aprobado, porque Vigo lo aprobó la semana pasada, de manera provisional, y salió publicado en el DOG".
Benito Iglesias admite que hay demanda de vivienda nueva, pero "no cuenta con oferta suficiente, porque las 2.825 viviendas nuevas disponibles se encuentran en toda la provincia y se trata de edificaciones que no se han logrado vender". La mayor parte de la demanda se encuentra en el Concello de Ourense, que no dispone de pisos nuevos, debido a que permanece sin PXOM, que ha sido anulado por los tribunales de justicia hace diez años. Esto tiene "efectos muy negativos en el conjunto de la economía, porque todos los sectores colindantes al de la construcción de viviendas tampoco se mueven", agrega Iglesias.
La rehabilitación de vivienda tampoco ha funcionado este verano, tras la aprobación de la nueva ley gallega que regula esta materia, "porque la Concejalía de Urbanismo no funciona, está bloqueada. Una licencia tarda meses, incluso años, por lo tanto, la gente ya ni las pide".
Sumando las nuevas y usadas, la provincia de Ourense mantiene en el circuito de comercialización 6.400 viviendas en la provincia de Ourense, de las cuales 3.000 se encuentran en la capital. La provincia de A Coruña cuenta con 17.500 viviendas usadas dentro del circuito; la ciudad de A Coruña, 4.500; Santiago, 2.500; Ferrol, 1.500; la provincia de Pontevedra, 14.300; Pontevedra ciudad, 1.200; Vigo, 4.600; la provincia de Lugo, 6.000 y la ciudad de Lugo, 1.800, según los datos de Adeido.
En vista de la situación, Benito Iglesias sostiene que "la Galicia interior se está convirtiendo cada vez más en la Galicia vacía. Los estímulos fiscales para fijar población no son suficientes ante una falta de planificación de la vivienda en nuestra comunidad, que deja en evidencia una errática política en esta materia durante las dos últimas décadas".
La falta de PXOM "es uno de los principales causantes" de la paralización del sector inmobiliario, "pero también lo es que somos una provincia con poco peso económico, porque los ourensanos tienen las rentas más bajas y las pensiones más reducidas del Estado". Esto se suma a la pérdida de más de 100.000 jóvenes en los últimos años, "lo que imposibilita la reactivación económica".
Muchos de los jóvenes de la provincia de Ourense se trasladan a Vigo y su área metropolitana, "para buscar una salida laboral, por lo que Ourense se está convirtiendo en una ciudad dormitorio del área metropolitana de Vigo. Guste o no guste, es lo que hay", concluye Iglesias.
