Nueve meses de prisión, más 1 año y 9 meses de alejamiento. Es la condena que ayer aceptó un hombre que, pese a tener prohibido por una jueza acercarse a su expareja, se dirigió a su portal y esperó a que saliese. La abrazó y, cuando ella pensaba que le iba a dar un beso, recibió un mordisco muy fuerte que le causó lesiones. Después la llevó hasta la puerta del garaje para seguir agrediéndola. Los gritos alertaron a un ciudadano, que retuvo al maltratador hasta que llegó la policía.