Concellos de la provincia de Ourense han solicitado camiones cisterna a la Diputación, para paliar los efectos de la sequía y dar respuesta al incremento de consumo que se registra durante el período estival, por la afluencia de emigrantes retornados y visitantes. Durante las últimas semanas, han cursado sus peticiones los municipios de Petín, Vilamartín de Valdeorras, Vilardevós, Xinzo de Limia y Os Blancos.
A pesar de la vaga de fuegos que sufre la provincia, la Diputación ha tenido que recurrir al Consorcio Provincial de Incendios para abastecer con cisternas de agua los núcleos de población afectados por graves problemas de suministro. Están interviniendo en el reparto, vehículos de los parques de bomberos de Xinzo, Verín y O Carballiño. Cuentan con un vehículo nodriza, que puede transportar 25.000 litros de agua, cuya compra ha contado con fondos del programa ARIEM, gestionado por la Axencia Galega de Emerxencias.
Por su parte, los concellos de Ribadavia, A Rúa y Petín solicitaron antes del mes de junio a la Confederación Hidrográfica Miño Sil nuevos puntos de captación de agua, diferentes a los que mantenían hasta la fecha, por el agotamiento de las reservas.
A Rúa gestionó una captación temporal de agua en la presa de San Fiz, para garantizar el suministro de la población. Realizó la petición, porque tiene allí una infraestructura antigua, que está utilizando con el permiso de la CHMS.
El Concello de Ribadavia tiene la toma habitual en el Maquiáns, un río que atraviesa el Concello de Carballeda de Avia, que presenta un nivel muy bajo. Por lo tanto, el gobierno local ha tramitado un permiso temporal para bombear agua desde el Avia o desde el Miño.
La provincia de Ourense permanece en prealerta por seguía desde el pasado mes de enero, debido a la falta de precipitaciones. En el año hidrológico -la Confederación Hidrográfica Miño-Sil lo mide desde el día 1 de octubre de un año al 30 de septiembre del siguiente-, las precipitaciones se han reducido en más de un 40%.
El presidente de la CHMS, Francisco Marín, ha instado por carta a todos los ayuntamientos, hace varios meses, para que hagan un "uso responsable de los recursos". El Concello de Ourense ha suprimido, prácticamente, los baldeos nocturnos, mediante los que limpiaba las calles y las plazas con agua a presión. Marín recomendó a los concellos reducir la presión nocturna de la red de abastecimiento, para aminorar la pérdida de agua por fugas en las tuberías.
El organismo de cuenca pide a los ciudadanos que intenten ahorrar, mediante pequeños gestos, como cerrar el grifo mientras están lavando los dientes, reducir el llenado de piscinas y utilizar la ducha, en lugar de la bañera, que requiere mucha agua.
