Pro Animales Carballiño muestra su indignación ante el Seprona, Guardia Civil y el alcalde de O Irixo por "no hacer nada para evitar la muerte de unos perros y gatos" en la casa de una anciana que el pasado jueves fue ingresada por los servicios de emergencia. Desde ese mismo día un vecino alertó de que en la vivienda quedaban animales.

El viernes el vecino llamó al Seprona de O Carballiño, ya que los animales estarían pasando hambre y sed porque la anciana no tenía familiares. Ante la falta de respuesta, por la noche llamó a la Guardia Civil y envió un correo electrónico al Concello de O Irixo y otro al Seprona.

El domingo varias voluntarias de la protectora de animales se personaron allí a las 10 horas y vieron que la casa estaba cerrada a cal y canto y en el interior se escuchaban lamentos de animales. Llamaron al Seprona y contestaron que era cosa del Concello, y "el alcalde nos dice que es cosa de la Guardia Civil, por lo que volvemos al cuartelillo a denunciar por escrito, y les decimos si pueden llevarla al juzgado de guardia para conseguir una orden de retirada urgente de los animales y nos dicen que hasta el día siguiente nada".

Ya ayer por la mañana llamaron nuevamente a la Guardia civil "y nada", y llamaron al Juzgado "y no les había llegado ninguna denuncia", por lo que fueron a denunciar.

Los voluntarios no saben cuánto más aguantarán los animales y ayer por la tarde escuchaban algún gemido y estuvieron esperando hasta las 20 horas y "no apareció nadie". Ante estos hechos, las protectoras están indignadas ante tanto "pasotismo institucional".