La pendiente supera el 20% en el extremo de la calle Viso donde el sábado a las 20.30 horas tuvo lugar el atropello, en las inmediaciones del Mercadona. La inclinación de la calles es uno de los factores de riesgo de siniestralidad de esta zona. Además, vecinos y usuarios se quejan de la falta de visibilidad y de que algunos vehículos descienden a velocidad excesiva. En la vía no hay restricción de velocidad específica -rige el límite general de 50 km/h en casco urbano-, ni tampoco hay pasos de peatones elevados o bandas rugosas. Estas son algunas de las medidas que estudia implementar el concello de Barbadás, titular de la vía -la que mayor tráfico canaliza entre Piñor y Valenzá-, y responsable de la seguridad del tráfico en el municipio. Según el alcalde, Xosé Carlos Valcárcel (PSOE), la intención es convocar una junta local de seguridad vial a la que se invitará a Guardia Civil, Policía Local, Protección Civil y colectivos como "Stop Accidentes", para que "los técnicos en la materia detecten posibles puntos negros y planteen soluciones".
