La sociedad gestora está volcada, además de en la prestación de servicios de apoyo a la innovación a empresas bajo la premisa de la mejora continua, en el apoyo al emprendimiento. El Parque Tecnológico de Galicia cuenta con el Centro de Empresas e Innovación (CEI), la incubadora empresarial de la Tecnópole, desde que se puso en marcha en 1992. Desde su creación, han pasado 180 empresas por los nidos del CEI.

Fue el primero de la provincia y continúa siendo el mayor. Está ubicado en el edificio central del Parque, donde se encuentran también las oficinas de la sociedad gestora, para facilitar el acceso continuado de los emprendedores a los servicios de asesoramiento que se les presta para el desarrollo de sus proyectos de negocio. Cuenta con una superficie total de más de 1.500 metros cuadrados, repartidos en nidos de diferentes dimensiones que van desde los 20 hasta los 100 metros cuadrados. Actualmente están ocupados al 60%.

Cerca del 50% de los proyectos emprendedores del CEI están relacionados con las TIC. El resto se distribuyen entre las tecnologías de la salud, las tecnologías ambientales, la fotografía especializada en el entorno empresarial, el diseño, la alimentación, la educación social y la consultoría de negocio.

También tienen cabida en la Tecnópole aquellas empresas que no necesitan un espacio físico estable, pero desean mantener una imagen profesional y disponer de servicios o instalaciones de forma puntual, por lo que existe la opción de domiciliación virtual, a la que hasta ahora han recurrido 18 entidades.

El impulso del emprendimiento innovador es una de las prioridades de la Tecnópole por lo que, además de gestionar el CEI, desarrolla iniciativas propias de apoyo al emprendimiento y se involucra en otras promovidas por entidades con las que colabora. La Preincubadora que la Tecnópole promueve con la Universidade de Vigo acoge este año cuatro nuevos proyectos, que ya están instaladas en el CEI.

La Tecnópole cuenta con una instalación científico-tecnológica de primer nivel, el Laboratorio de Biotecnología, con unas condiciones de uso especialmente pensadas para los emprendedores del sector. Dado que la inversión en infraestructuras es una de las principales barreras que se encuentran los emprendedores bio, el PTG les ofrece unas instalaciones muy bien dotadas que pueden utilizar por el período de tiempo que necesiten.