Una licencia concedida hace 20 años, en 1996, para la construcción de un edificio de cinco plantas en la zona de As Burgas se convierte en foco de conflicto, después de que el por parte del gobierno municipal se siguiese adelante con el expediente de caducidad, y se rechazaron ayer las alegaciones presentadas por los propietarios del terreno. Por lo que el recorrido que sigue es que el mencionado expediente para anular esa licencia se remite al Consello Consultivo de Galicia, cuyo informe es preceptivo, por cual si es favorable a la propuesta municipal, se considerará nula.
Por su parte, el represente de los propietarios de los terrenos, el letrado Feijóo Miranda, defiende la legalidad de la licencia concedida, como así lo vendría a ratificar una sentencia judicial, por lo que anuncian que acudirán a la vía Contencioso Administrativa.
La decisión del Concello la daba a conocer al termino de la reunión de la Junta de Gobierno Local, el alcalde, Jesús Vázquez, y que se sustenta en dos informes técnicos, en los que se pone de manifiesto que no se puede ejecutar esa licencia por "no ajustarse al planeamiento vigente -el Plan Especial de Protección de As Burgas, de 2012, recurrido en vía judicial- y, por otro, al apreciar los técnicos que esa licencia de 1996 se concedió sin el preceptivo y vinculante informe de la Comisión de Patrimonio de la Xunta.
Se trata de un polémica que se arrastra del anterior Gobierno socialista, ya que a raíz del derribo del inmueble en ruinas, por parte de la anterior responsable de Urbanismo, áurea Soto, se adoptaron medidas para la anulación de esa licencia, además de denunciar a los titulares de la parcela y promotores de la obras relacionados con supuestos restos arqueológicos.
Demolición y construcción
Por su parte, el representante de los propietarios, una vez tuvo conocimiento de la decisión del gobierno municipal asegura que la revisión de la licencia concedida en 1996 "no se sostiene", y entiende que obedece a una decisión "arbitraria" para impedir el legitimo derecho a edificar, así como evitar indemnizar a los propietarios de este solar.
Sostiene Feijóo que la licencia para demoler y construir un edificio de cinco pisos en ese solar, colindante con el área de reparto de As Burgas, fue otorgada de forma plenamente legal en 1996 y "no es aceptable iniciar su revisión casi 20 años después, cuando se encuentra en vigor" y los propietarios realizaron las obras de demolición, después de que una sentencia judicial les diera la razón y ratificara su derecho a que la licencia les fuera expedida.
Pero el Concello procedió en su momento a la paralización de las obras de demolición por los restos hallados, aunque sin concretar el valor de los mismo. Después de un cruce de denuncias entre el Gobierno socialista y los propietarios, el expediente de revisión para la anulación de la licencia siguió adelante.
