Discapacitados de la comarca y asistentes que les ayudan ponen sobre la mesa las graves dificultades que sufren para acceder al transporte público, sobre todo a los barcos de transporte de ría. Así, relatan que en el barco entre Cangas y Vigo no pueden acceder con una silla con motor en la mayoría de las ocasiones debido al peso de la misma y a la dificultad que supone para el personal levantar la silla.

Desde Mar de Ons explican que cuentan con una rampa, aunque los usuarios aseguran que solo sirve para las sillas de ruedas sin motor, en las que los discapacitados suelen ir acompañados de otras personas. Sí que reconocen desde esta naviera que los accesos a las islas Cíes y Ons no están adaptados, con problemas graves sobre todo en Ons, debido a la cantidad de escaleras que es necesario superar para acceder al muelle. Es habitual que los discapacitados encuentren reticencias a la hora de comprar billetes para la isla buenense.

Sobre los autobuses, una asistente personal de personas con discapacidad critica que las marquesinas no estén adaptadas y que los sistemas para subir sean manuales, obligando a veces a los usuarios a avisar con 48 horas de antelación sobre sus viajes. Además deben avisar por correo electrónico y no todos tienen". Pone como ejemplo el sistema de rampas electrónicas en ciudades como Palencia.