-En este cambio del que habla echo de menos nuevas políticas sociales. ¿Se está esperando a los próximos presupuestos?
-No, no, se están haciendo. Hay que tener en cuenta que trabajamos con un presupuesto que no hicimos. Pero hubo novedades, como la puesta en marcha de los comedores escolares para niños necesitados, eso no existía. Estamos preparados para recoger a los refugiados, vamos a realizar una política diferente respecto a la Casa dos Pobres, pero, claro, son asuntos que se tienen que abordar con los presupuestos del año que viene. Pero ya digo, para nosotros ya hubo un pequeño salto; el gran salto es imposible si se carece de presupuesto.
-No escucho ruido de sables en el gobierno.
-Es que no lo hay. Somos un gobierno pacifista. Estamos consiguiendo algo muy difícil en un gobierno de coalición, no somos tres gobiernos en uno, somos un gobierno de tres grupos. No hay tensiones. Las juntas de gobierno son más tranquilas incluso que las de un mismo grupo. No me quiero imaginar las que hubo cuando estaba el PP y Nardo Faro.
-¿Qué espera del área metropolitana?
-Espero que no sea una pelea de gallitos de corral. Quieron un área metropolitana con competencias y financiación, que contribuya a solucionar los problemas que tenemos los concellos, sin que eso signifique que nuestros vecinos tengan que pagar más. Para que funcione el área metropolitana la Diputación y la Xunta tienen que ceder parte del dinero que manejan.
-¿Y la mancomunidad?
-Tienen que estar todos los concellos de la comarca y dotarla de más servicios.
