Jorge Fernández es el encargado de gestión del monte en la Comunidad de Domaio. De niño acudía a las riberas del río da Freixa y para él, el acondicionamiento del roteiro que se está llevando a cabo, aguas arriba desde O Souto, tiene un doble significado,de conservación medioambiental, por un lado; y sentimental por otro. Con el presidente de los comuneros, Juan Santos y en compañía del representante de la empresa que ejecuta los trabajos Arbogal 2007, Luis Alfonso Iglesias, revisan palmo a palmo la evolución de la obra, que afecta a unos unos 3 kilómetros de ribera. El roteiro, que ya estaba construido con algunos puentes de madera que el paso del tiempo los fue deteriorando, parte del lugar conocidao como O Souto, en A Costa, y asciende por Carregueira, Paradela, A Devesa y llega hasta As Meáns, junto a la urbanización de Golf Domaio. Pasa sobre el corredor do Morrazo a través del paso de Fontaíñas y tras el puente de As Meáns, el roteiro abandona el río para continuar por un antiguo camino de carro, que comunica Viduido con Pedra do Navío, que se está acondionando a través del proyecto, y llega a la antigua cantera de Chan do Porco, de donde se suministraban de piedra los vecinos, y que se converirá en un nuevo mirador a la ría, en donde se plantarán árboles. La comunidad ya procedió a la explanación con aporte de tierra. Desde aquí se accederá a la emblemática Poza da Moura, ya en el río Miñouva, a escasos metros.
Precisamente en esta zona, la construcción del desdoblamiento del Corredor do Morrazo en autovía contempla la instalación de una pasarela peatonal que servirá para sujetar las actuales catenarias del agua, que actualmente cuelgan sobre el corredor, y para que los vecinos que acceden desde los barios de Calvar y Verdeal, lleguen directamente a la poza sin necesidad de dar la vuelta por Fontaiñas.
Las obras comenzaron a finales de julio con un presupuesto de 95.000 euros, de los fondos propios de la Comunidad de Montes, y se prolongarán a lo largo de 9 meses. Se prevé actuar sobre cinco pasarelas de madera, dos son de nueva construcción, en Carregueira y Fonte Martiño. En cuanto a la vegetaciçón, además del desbroce de márgenes, la intención es eliminar el eucalipto y sustituirlo por árboles de ribeira, tocando lo mínimo para respetar la vegetación propia como los ameneiros, vidueiros, abeleiros, freixos, loureiros, salgueiras y carballos. Está prevista la plantación de, al menos, 500 pies, la mayoría de carballo gallego y castaño híbrido, además de sobreiras, aciñeiras, freixos, vidueiros, ameneiras y hayas. La problemática que plantea la retirada de los eucaliptos es debido al gran tamaño de algunos ejemplares por lo que se valora establecer un lote y que una empresa interesada los tale.
La actuación también contempla la limpieza de una zona que era antigua escombrera, por debajo de la pista de Souto-Pumariño, y que se llenó de especies invasoras. En la zona ya se construyó un muro en piedra para contener la ladera.
Para los comuneros, un punto emblemático en este roteiro es Fonte Martiño: "Hay que parar e disfrutar", aseguran tanto el presidente Juan Santos, como el encargado de gestión del monte, Jorge Fernández. La fuente ha sido acondicionada con una piedra y se ha construido una pasarela de madera. El río separa los barrios de Costa y Calvar.
