La portavoz del Bloque de Silleda, Tania Cornado, adelanta que su partido continuará luchando para que la nueva ordenanza fiscal que permite la deducción del IBI por el catastrazo incluya la deducción del 60% para los bienes inmuebles emplazados en suelo de núcleo rural, tal y como pidió anteayer en el pleno y como se aplica en el concello vecino de Lalín. Cornado recuerda que Silleda tiene uno de los tipos de gravamen más altos de la comunidad gallega, con un 0,53% en urbana y un 0,4 en rústica, mientras que en Caldas de Reis es de un 0,4 en urbana, igual que en Salvaterra de Miño o en Padrón, donde además el tipo de rústico baja al 0,3. Cree que esta bonificación "es un atractivo para fijar población más interesante que cualquier cartel de Empadróate".