El grupo de gobierno de Lalín considera prioritaria la ampliación del cementerio de A Romea, retomando así un proyecto que acumula años de retraso. El concejal de Urbanismo, Nicolás González Casares, mantuvo los primeros contactos con el único afectado y en próximas semanas habrá otra reunión para conocer la posición del dueño de los predios necesarios para extender la superficie de un camposanto que está al límite de capacidad desde hace tiempo. El otro cementerio municipal está completo desde hace muchos años.
Al margen de las negociaciones con Manuel del Río Solla, el grupo de gobierno incluirá una partida específica de 90.000 euros en los presupuestos del próximo año. Fuentes municipales señalan que dar mayor capacidad a A Romea es fundamental. En lo que respecta al estado del proceso -el anterior ejecutivo anunció el proyecto en junio de 2012- desde la administración local explican que en los presupuestos de 2014 figuraba una partida de 90.000 euros para la consecución de terrenos que no llegó a tocarse. La misma cuantía se propuso en las cuentas municipales del presente año pero, según fuentes municipales, el anterior gobierno solamente empleó 30.000 aunque mediante un expediente de modificación de créditos con destino a la compra del Parking Europa. Así las cosas, desde el Concello se indica que el anterior expediente de expropiación se encontraba en un "estado de concreción larvario cuando este gobierno llegó al ayuntamiento". Es decir, entiende que no hubo avances significativos en lo referido a la obtención de los terrenos.
Este larguísimo proceso comenzó a concretarse hace más de tres años cuando se presentó el proyecto. El mismo y comprendía la extensión de este cementerio hasta el puente de la autopista, en Botos, con lo que se ampliaría en 16.800 m2 una infraestructura que ahora dispone de 22.285. No obstante ya en agosto de 2011 se había adelantado la intención de llevar a cabo estas obras de modo que el camposanto situado en la parroquia de Donramiro iba a incrementar en 3.200 el número de sepulturas y el recinto pasaría a disponer de 7.292 plazas.
Para llevar a cabo este proyecto fue necesario acometer una modificación puntual del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) que se retrasó más de lo que cabía esperar inicialmente. En marzo de 2013 el expediente urbanístico encaraba su diseño definitivo para su remisión a la Xunta. Antes, la Consellería de Medio Ambiente había eximido a este proyecto de la evaluación ambiental estratégica por entender que la intervención no tenía un gran impacto en el medio natural, aunque sí es preciso talar algunos árboles de la franja que separa la carretera que une A Romea con Botos y Donsión y el puente sobre la autopista, que es hasta donde llegará la ampliación. Otro avance llegaba en enero del año pasado con el informe favorable de la Dirección General de Carreteras, precisamente por la afección del proyecto a uno de los márgenes de la AP-53. Y hace ahora casi 20 meses el pleno aprobaba la modificación puntual del plan xeral y daba vía libre a un proyecto en el que no hubo más avances.
