Después de una primavera seca y un mes de julio caracterizado por la sucesión de olas de calor, agosto se convirtió en tiempo de grandes contrastes térmicos en las comarcas. También las lluvias volvieron en agosto para dar un ligero respiro a la sequía arrastrada de los últimos meses a consecuencia de la combinación de la falta de precipitaciones, las elevadas temperaturas y los vientos cálidos procedentes de zonas desérticas.
La temperatura media en las comarcas se situó en torno a los 17 grados según los datos recopilados por la Consellería de Medio Ambiente. En Lalín, la estación meteorológica situada en Mouriscade (Vilanova) recogió una temperatura media de 17,39 grados, mientras que en Camanzo, (Vila de Cruces) se sitúa en los 18,75 grados, en la estación de Serra do Faro (Rodeiro) la media se establece en los 15,73 grados y en Forcarei en los 16,38 grados.
Pero el mercurio sufrió grandes variaciones en las comarcas a lo largo de este mes. En el caso de Lalín, en los diez primeros días las temperaturas máximas se situaron, en varias jornadas, próximas a los 30 grados, el día 10 alcanzaron los 31 y solo tres días después las máximas cayeron más de 15 grados para no superar los 14,8 grados. Los contrastes se vivieron, de forma similar, en el resto de los municipios dezanos. La jornada del 13 se convirtió en una de las más frescas al no superar las máximas los 13,7 grados en Rodeiro, los 15,8 en Camanzo o los 12,9 grados en Forcarei.
Las máximas escalaron en Lalín hasta los 31,9 grados el día 20, convirtiéndose en la jornada más calurosa. El mismo día los termómetros registraron similares valores en el resto de estaciones meteorológicas de la zona, lo que establece esta jornada como la más calurosa del mes. Vila de Cruces alcanzó los 32,7, siendo el valor más elevado de las comarcas. Rodeiro registró de máxima 29,7 mientras que en Forcarei el día más caluroso fue el 10, con 29,6 grados, solo una décima más que la temperatura registrada el día 20.
En cuanto a las mínimas, los termómetros se mantuvieron con registros también dispares y frescos. El más extremo se registró en la estación de Mouriscade en la jornada del día 8, donde el mercurio se desplomó hasta los 2,7 grados de mínima, la más baja de las comarcas en todo el mes. En esa jornada la capital dezana registró una temperatura máxima de 23 grados. Con solo 12 días de diferencia el mercurio oscilo desde los 2 grados de mínima hasta casi los 32 grados de máxima.
En lo referido a las precipitaciones, agosto se situó en valores similares a los de 2014 y de los últimos años a excepción de 2013, catalogado como el más seco del siglo al registrarse en Lalín solo 4 litros por metro cuadrado en todo el mes. Si bien la situación arrastrada propició incluso que se celebrase el Clamor religioso de Vilariño (Agolada) a Bermés (Lalín), solicitando la intervención divina para lograr precipitaciones.
La capital dezana registró 17 días de lluvia en los que se recogieron 31,2 litros, frente a los 34 del año pasado. En Lalín, la jornada más lluviosa fue el día 23 con 10,8 litros. Valores similares se recogieron en Camanzo, con 40,2 litros en los 12 días en que llovió. Rodeiro también contabilizó otros tantos días lluviosos aunque con mayor intensidad para alcanzar los 58,9 litros por metro cuadro. En cambio, la estación de Pereira (Forcarei) sumó 19 días de precipitaciones que dejaron un total de 121,8 litros por metro cuadrado.
