Si hay algo más tradicional en la comarca que el cocido o cualquiera de sus fiestas gastronómicas, es la música de banda. Por eso, dos de ellas quisieron agasajar ayer a sus socios y simpatizantes con sendas fiestas en las que combinar la música y una buena comida en compañía de ésta.

En Lalín, la Banda celebró ayer su primera Romaría do Socio, que arrancó al atardecer en la explanada del auditorio. Un menú a base de pulpo, churrasco y empanada hizo las delicias de pequeños y mayores, al son de la música del dúo Azahara, que prolongó su actuación hasta bien entrada la noche. Además, entre todos los asistentes se sorteó un cordero. La velada fue una forma de agradecer a los socios el apoyo que prestan a la banda en todas sus iniciativas. Por eso, la formación que dirige Bram Sniekers tiene preparadas más novedades, que dará a conocer en los próximos días, y con las que quiere corresponder a ese respaldo que le demuestran los socios.

Hasta más allá de medianoche se prolongó el quinto Música a Fartar, que organiza la Banda Recreativa e Cultural de Bandeira. Los actos comenzaron poco después de las 13.00 horas, y toda la jornada transcurrió en el polideportivo, debido a la amenaza de lluvia. Ésta no impidió que acudiesen nada menos que 400 personas a la comida de confraternización. La música, además de secciones de la banda, corrió a cargo de la coral Vales Mahía, los gaiteros de A Pereiriña y Perlas de Arosa.