La Guardia Civil de Tráfico investiga a un vecino de Ribadumia como supuesto autor de un delito contra la seguridad vial, pues según las primeras pruebas que se le practicaron tras el accidente que sufrió ayer al amanecer, conducía bajo los efectos del alcohol y las drogas.

El siniestro se produjo a las ocho de la mañana, en la carretera provincial EP-9006, a la altura de O Facho, en la parroquia cambadesa de Castrelo. El presunto infractor conducía un Ford Focus, y en un momento dado se salió de la carretera, chocando contra el muro de cierre de una vivienda.

El muro era de piedra, pero fue tal la violencia del impacto que cayeron varios de los bloques. El vehículo sufrió daños muy considerables en su frontal, pero a pesar de la aparatosidad del accidente, el conductor salió ileso.

Al llegar al punto la patrulla de la Guardia Civil se le realizaron al conductor las correspondientes pruebas de alcoholemia y drogas. En la primera de ellas dio positivo, con una tasa de 0,67, lo que obligará a tramitar la denuncia por la vía penal. También dio positivo por consumo de estupefacientes, si bien en este caso el resultado es "indiciario", y deberá corroborarse con una prueba hospitalaria.

En el operativo participaron los efectivos de Protección Civil de Cambados, que estuvieron hasta las 11.30 horas, dado que fue necesario retirar las piedras que se derrumbaron tras el impacto del coche. También hubo que echar abajo parte del muro que en principio no se había caído, puesto que los servicios de emergencias alertaron de su inestabilidad, y del consiguiente riesgo de que se desplomase más tarde. Finalmente, fue necesario proceder a la limpieza de la carretera, sobre la que habían quedado esparcidos numerosos restos del vehículo.