El carrusel de temporales que afectó ala comarca durante los meses de noviembre y diciembre se ha cobrado, como víctimas, a las sendas litorales que el Concello de Vilanova posee.
La mayor parte de ellas presentan daños importantes que no han sido solucionados en todo este tiempo, algo que ha causado preocupación en un sector, el de las mariscadoras, que tiene que acudir a diario a las playas para ejercer su actividad laboral.
Así lo reconoce la patrona mayor de Vilanova de Arousa, María José Vales Martínez, al señalar que, "los viales para acceder a las playas se encuentran en un estado deplorable por la falta de mantenimiento y las mujeres tenemos muchas dificultades para llegar a la playa, primero en los coches, con los que tenemos que sortear baches, y después con los carros".
Un ejemplo de esa situación es la zona de O Terrón, donde los temporales han causado bastantes daños en todos los viales, daños que "no se han solucionado por parte del Concello, que debería estar pendiente de este tipo de situaciones si lo que pretende es vender a los turistas estas sendas, como presume el alcalde".
Además de las mariscadoras, también perjudica a la vigilancia de la cofradía, ya que "debido al estado en que se encuentran las sendas, el vehículo no puede pasar, lo que dificulta la posibilidad de sorprender a los posibles furtivos que amenazan los bancos marisqueros".
Vales espera que, en los próximos días, el gobierno de Vilanova recurra a la maquinaria de la Mancomunidade para solucionar la situación y devolver a la normalidad los tramos más afectados de las sendas y de los viales que conducen a O Terrón, porque "están llenos de socavones y baches".
No es la primera vez que la patrona mayor denuncia la situación en la que se encuentran los accesos que utilizan las mariscadoras a las playas de Vilanova de Arousa, por lo que "parece que vuelve a repetirse la misma historia sin que el grupo de gobierno se preocupe lo más mínimo por solucionarla".
El estado de las sendas no solo perjudica a las mariscadoras, sino que también se convierte en un problema para el turismo, y sobre todo, para los peregrinos. No en vano, por ese tramo de O Terrón también pasan los peregrinos que recorren la Variante Espiritual, encontrándose "con el pésimo estado de conservación, lo que no les deja una gran impresión a todos los que se acercan por Vilanova".
Las sendas peatonales se han convertido en uno de los proyectos más importantes que el Concello de Vilanova ha puesto para potenciar el turismo en el municipio, tratando de atraer a visitantes que apuesten por un turismo de salud, paisajístico y medioambiental. De hecho, en los últimos años se han construido un buen número de sendas que unen el casco urbano con Rego de Alcalde o que bordean parte de la ensenada de O Esteiro. Este año, el propio alcalde, Gonzalo Durán, llegó a reconocer que el objetivo era completar la senda que bordea la ensenada de O Esteiro, señalada en rojo como una de las grandes prioridades, así como continuar hasta Cambados con la construcción de una pasarela peatonal sobre el Rego de Alcalde.
