Los técnicos de Augas de Galicia se trasladaron ayer a Caldas para estudiar los problemas de saneamiento en los lugares de Paradivas, en la parroquia caldense de San Andrés, y Sabadín, en la parroquia morañesa de Saiáns. Caldas y Moraña comparten la estación de depuración de aguas residuales (Edar) ubicada en el primer municipio y que sistemáticamente registra errores en su funcionamiento, lo que provoca que desde la administración autonómica remitan continuas sanciones económicas al Concello de la villa termal.
Los técnicos del ente autónomo iniciaron un estudio para mejorar el sistema de depuración de la Edar de Paradivas, con el objetivo de poner fin a estos fallos. Este fue uno de los acuerdos alcanzados en la reunión para abordar la problemática del río Umia que se celebró el pasado miércoles entre la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez; la directora de Augas de Galicia, Teresa Gutiérrez; y los miembros del comité de crisis del Umia, formado por el alcalde de Caldas, Juan Manuel Rey; y los portavoces municipales de los grupos con representación municipal, Manuel González (PSOE), Manuel Fariña (BNG) y Fernando Pérez (IdCR y candidato del PP a las elecciones).
En ese sentido, desde el Concello de Caldas trasladaron los requerimientos al gobierno morañés con el objetivo de que se haga cargo de parte del coste del servicio. Rey y su homóloga de Moraña, Luisa Piñeiro, esperan solucionar una situación que se alarga desde hace años con la firma de un convenio por la cual el Concello morañés se hará cargo de la parte proporcional del coste del mantenimiento y control del saneamiento y de la Edar compartida y que cuya gestión viene asumiendo íntegramente la villa termal desde su puesta en marcha.
A pesar de varias conversaciones "informales" al respecto entre los dos regidores, por el momento solo se trasladó un requerimiento de pago desde el Concello de Caldas. "Estamos esperando a que nos manden el borrador del convenio, lo que nos mandaron es un escrito sin justificar los costes y no vamos a firmarlo si no aparecen justificados", indicaba al respecto Piñeiro. Un aspecto que Rey reconoció que "se corregirá".
La alcaldesa de Moraña indicó que en lo que respecta al saneamiento de Sabadín "la red funciona perfectamente, así como el bombeo a la Edar de Paradivas" y reconoció no tener constancia de las sanciones de Augas de Galicia al Concello de Caldas por el mal funcionamiento del sistema de depuración que comparten. Por la parte de Sabadín, son una decena de casas, aproximadamente, las que están conectadas al saneamiento con Paradivas.
El portavoz del BNG de Caldas, Manuel Fariña, pidió ayer la dimisión de la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez. El nacionalista acusa a la conselleira de "mentir e insultar la inteligencia de todos los caldenses" al negar el pasado miércoles en la reunión que mantuvo con el comité de crisis del Umia la presencia de la toxina microcistina en el río.
"Son conocidas por la opinión pública analíticas de 2010 que confirman la presencia de la toxina en el Umia puesto que fueron publicadas en su momento", indicó Fariña, que presentó los análisis del agua a los que hacía referencia en los que se indica la presencia de la toxina en la captación caldense, así como en la presa de Rabuñade, en el concello de Portas.
Además, el portavoz del BNG de Caldas, indicó que la propia Xunta tiene un estudio realizado por el profesor Fernando Cobo en 2013, que dirigía la Estación Hidrobiolóxica do Encoro do Con, en el que consta la presencia de microcistina "en todos los años en los que analizaron las muestra".
En su comparecencia, Fariña pidió al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, "se ponga al frente de un problema tan importante de salud pública y asuma sus responsabilidades".
En ese sentido, reiteró las peticiones realizadas por el comité de crisis del Umia para que visitase la villa termal para "conocer de primera mano la problemática del Umia" y se reuniese con el propio comité de crisis del Umia.
