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A Illa impulsa una campaña para controlar las camadas de gatos callejeros en el municipio

Cuenta con la colaboración del Refugio de Animales de Cambados y consistirá en la esterilización de esos grupos, sobre todo, en el entorno del parque de Carreirón

Una camada de gatos al sol en una calle de A Illa. // Noé Parga

la proliferación de camadas de gatos callejeros se ha convertido en una gran preocupación en A Illa que, en los próximos días, va a poner en marcha una campaña de control y esterilización de estas camadas, para evitar los daños que provocan en el entorno próximo. Esta campaña de esterilización contará con la colaboración del Refugio de Animales de Cambados y se desarrollará en las próximas semanas, sobre todo, en el entorno del parque de Carreirón.

La edil de Medio Ambiente, Gabrielle von Hundelhausen, reconoce que se han localizado varias camadas de gatos en las inmediaciones del parque natural, una reserva ornitológica importante debido al gran número de aves que anidan o hibernan en esa zona.

La intención es frenar la posible amenaza que pueden suponer para las aves la proliferación incontrolada de estas camadas de gatos que no solo han provocado problemas en Carreirón, sino en otros puntos del municipio, como el propio muelle de O Xufre, donde es habitual verlos rondando las descargas de mejillón.

Para financiar la esterilización de las camadas, el Concello de A Illa organizó el pasado 3 de diciembre una gala para recaudar fondos. En esa gala participaron la escuela de baile Perla de Arousa y el grupo de baile y música tradicional de Dorna, consiguiendo una recaudación de poco más de 1.000 euros.

Esa cantidad se destinará íntegramente a frenar la expansión de las diferentes camadas de gatos que se han localizado en todo el Concello, apostando por su esterilización porque "nuestra intención no es deshacernos de ellos, pero sí evitar un crecimiento desmesurado".

Además del control de la población, el Concello también trabaja en concienciar a los habitantes del municipio en la importancia de la esterilización y la necesidad de mantener un control sobre estas poblaciones. No en vano, explica von Hundelhausen, el problema no es solo para el entorno que rodea a los gatos, sino que también "les afecta a ellos, ya que está comprobado que las camadas de gatos callejeros sufren la proliferación de enfermedades y sus expectativas vitales acostumbran a ser relativamente cortas".

A Illa ha sido el primero de la comarca en poner en marcha una campaña de estas características. Es cierto que municipios limítrofes, como el de Cambados, lo intentaron, pero nunca llegó a llevarse a cabo de manera efectiva, más allá de la colocación de una trampa en el jardín de la Casa dos Fraga.

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