El concejal de Facenda de Cambados, Xurxo Charlín, quiere aprobar cuanto antes las facturas que quedaron pendientes en el pleno de anteayer jueves después de que el cuatripartito perdiese la votación contra el Partido Popular porque faltaron dos concejalas del BNG. El edil argumenta que son muchos los autónomos y empresas que están esperando para cobrar esas liquidaciones, y que el proceso no puede demorarse para que dé tiempo a aprobar el gasto antes de final de año, de ahí que haya solicitado la convocatoria de un pleno extraordinario para el martes próximo.
El gobierno de Cambados llevaba a la sesión del jueves dos propuestas que el PP tumbó al votar en contra. Esa noche, los conservadores tenían mayoría, por la ausencia de dos ediles del Bloque, y eso supuso un revés para los planes del equipo de gobierno. Xurxo Charlín afirmó que el PP había sido "muy imprudente", pues con su voto en contra perjudicaba a autónomos y trabajadores municipales, pendientes estos últimos de cobrar la última parte del aumento salarial que el Gobierno del Estado les aprobó hace un año.
La situación le costará a las arcas municipales unos 1.200 euros, en concepto de abono de dietas por asistencia a los concejales. Pero Charlín arguye que no es posible esperar al pleno de noviembre, pues "la tramitación administrativa es larga y aún tenemos que exponer al público" la documentación.
Aragunde votó en contra en lo relativo al abono de las facturas alegando que no le habían consultado la posible finalidad del superávit. Charlín responde que, en la práctica, el margen de maniobra que tienen los concellos para escoger el destino de sus saldos económicos es muy restringido. "El PP quería hacer daño".
