En los primeros días de 2011, el Concello de Vilanova se hacía con uno de sus bienes más preciados, el pazo de Vista Real, unas dependencias cuya finalidad era convertirse en un gran centro de formación para acabar con el estigma que, durante años, salpicó a esa edificación, por haber sido emblema de la familia Charlín. Aunque se fue avanzando en ese camino, la eclosión del pazo como lugar de formación no llegaría hasta el mes de octubre de 2015, cuando el Concello decide trasladar a esas dependencias al Centro de Desenvolvemento Local (CDL) bajo la supervisión de Javier Piñeiro.
Tan solo cuatro días después de que la junta de gobierno local aprobase ese traslado, comenzaban las primeras actividades, al impartirse en las cocheras del pazo unos cursos AFD de jardinería e iniciarse un novedoso Obradoiro de Emprego con los módulos de Agricultura Ecolóxica y Turismo.
Eso fue solo el principio de una ingente actividad, con un crecimiento continuo en estos más de dos años, lo que llevó a que el Concello tuviese que ampliar las instalaciones y habilitase, el pasado mes de enero, la primera planta. En la actualidad, se está preparando la reforma del segundo piso para acoger nuevos proyectos y actividades, siempre dentro del sector de la formación.
El CDL también se ha convertido en un referente para las empresas, no solo por ofrecer información sobre la venta de parcelas del parque empresarial de Baión, sino también por las ayudas a emprendedores y particulares que gestiona, a lo que se suma la participación en la organización del Coworking que impulsa la Xunta a través del Igape, que ha convertido a la experiencia de Vilanova en la que más gente ha participado, con una experiencia celebrada, en la que participaron 22 emprendedores, y otra en camino, para la que solo restan dos plazas. Además, las empresas cuentan con el pazo de Vista Real para realizar actividades formativas o presentaciones de productos a sus potenciales clientes, un marco difícil de igualar en toda la comarca de O Salnés.
Campamento tecnológico
Una de las grandes apuestas que se ha hecho en Vista Real es la de la formación en las nuevas tecnologías. Además de los numerosos cursos sobre pilotaje de drones o impresión 3D, destaca la creación de un campamento tecnológico, que pasó de 62 alumnos en 2016 a los 144 del pasado año, cubriendo todas las plazas disponibles en cada una de las nueve sesiones de duración de esta actividad. La tercera edición comenzará el 2 de julio y contará con un precio más reducido que el de años anteriores (54 euros por alumno) y con muchas novedades y contenidos con respecto al pasado año.
El centro también acoge un sinfín de cursos durante todos los meses, centrados en sectores que necesitan una formación específica, como es caso de carretillero, visual merchandising o manipulador de alimentos entre otros. Este mes de junio, se batirán los propios récords del centro vilanovés, ya que se van a impartir un total de 10 cursos. La mayor parte de los alumnos de estos cursos son de Vilanova, pero también existe un importante porcentaje de otros puntos de la comarca.
