Tras tomar conocimiento de la expulsión por parte del Consello Nacional Galego de Esquerda Unida del concejal Miguel Alves Lago, quien pasa a integrar el pleno como concejal no adscrito, la corporación municipal con los votos del PSOE y la abstención del resto de los grupos, procedió a la reordenación de la representación de EU en las comisiones informativas y en los órganos de representación del Concello, así como las nuevas responsabilidades para Alves. Una decisión que ya cuenta con un recurso de reposición del edil por entender que recorta sus derechos constitucionales.

Atendiendo a los informes técnicos municipales, en base al pacto antitransfuguismo, el gobierno socialista planteó unos cambios en las representaciones que dejan fuera a Miguel Alves de la junta de portavoces, de algunas comisiones informativas, y tampoco podrá acceder a un local municipal para realizar sus labores de concejal.

En su recurso Alves expone que los concejales no adscritos tienen derecho a participar en las comisiones informativas de forma proporcional a su representatividad en el pleno, por lo que deberá variarse la composición de las mismas. También pide que se le faciliten medios materiales para desarrollar su labor representativa.