La alcaldesa de Cambados, Fátima Abal, y el concejal de Economía e Facenda, Xurxo Charlín, presentaron ayer al mediodía en una conferencia de prensa en el Ayuntamiento el primer presupuesto del cuatripartito de izquierdas. Un documento que asciende a 9,4 millones de euros -un nueve por ciento más que hace un año, cuando había alcanzado los 8,6 millones- y que contempla el incremento de las partidas de servicios sociales e inversiones, así como el mantenimiento de la de festejos.
En el caso de los servicios sociales, el cuatripartito reserva en sus presupuestos un total de 285.000 euros, frente a los 252.000 que estaban consignados en el último documento redactado por el Partido Popular. Los incrementos más notables se producen en los apartados de Emergencia Social -de 25.000 euros a 40.000- y en el del servicio de Ayuda en el Hogar, que pasa de los 210.000 euros que había en 2015 a 230.000 durante el presente ejercicio. A este respecto, Xurxo Charlín recuerda que "en nuestros programas electorales llevábamos incrementar el gasto en servicios sociales y cumplimos la promesa porque aún hay gente que lo está pasando mal".
En el caso del fondo de Emergencia Social, se utiliza para ayudar a familias en situación de riesgo a comprar alimentos, medicinas o a costear pequeñas obras urgentes en sus viviendas. En lo que atañe a la partida de Ayuda en el Hogar, el edil de Facenda justifica la subida de 20.000 euros en que "cada vez hay más demanda, y de hecho hay lista de espera".
También se habilita con 5.000 euros una partida específica para actividades de Igualdad, mientras que se baja de 8.000 a 5.000 la de actividades para la tercera edad. "Esto no significa que no vayamos a hacer cosas con los mayores -explica Xurxo Charlín-, pero lo que no vamos a hacer es el macroxantar con pulpeira del pabellón del Cabanillas".
Las cuentas de 2016 que el cuatripartito llevará al pleno ordinario del jueves próximo (día 25) también incluyen una subida en el capítulo de inversiones reales, donde aparecen consignados 780.000 euros, frente a los en torno a 300.000 del pasado ejercicio.
Rúa Real
Entre las obras más significativas que aparecen en el documento se encuentran la reforma de la plaza de abastos, para la cual el Concello debería abonar este año 219.000 euros; o el soterramiento del cableado eléctrico de la Rúa Real, una de las principales arterias comerciales y turísticas del conjunto histórico de Cambados. Esta obra cuesta unos 110.000 euros, y mejorará sensiblemente la imagen de uno de los puntos más importantes del casco viejo cambadés. Sobre esto, Charlín declaró que "ya que no podemos quitar los coches de la plaza de Fefiñáns, por lo menos quitamos los cables".
Otras actuaciones que aparecen en el documento son el ensanche de un vial en la calle Cruceiro; la mejora del asfaltado y la construcción de aceras en Burgáns (116.000 euros); o la mejora de las pistas de atletismo y tenis (40.000 euros entre ambas). También aparecen en las cuentas el parque biosaludable de Castrelo (50.000 euros) y obras en lugares como Lourido o Laxes.
Festejos
Algunos de los socios del actual gobierno de Cambados criticaron durante años al PP por considerar que consignaba demasiado dinero para festejos (esta es la partida en la que se incluyen los gastos de la Festa do Albariño). El exalcalde, Luis Aragunde, siempre alegó que para él eso no era un gasto, sino una inversión, ya que una adecuada promoción de la villa se traduciría después en un retorno para la hostelería y el comercio.
En este primer presupuesto de la izquierda, la partida para festejos vuelve a ser de 275.000 euros. Aunque el gobierno puntualiza que eso no significa que al final se vaya a gastar todo ese dinero. Charlín apunta que se mantiene la cuantía de 2015 por dos razones. Según él, en primer lugar esto se debe a que todavía les faltan por abonar numerosas facturas del año pasado, que no se pudieron pagar entonces por falta de crédito.
Y en segundo lugar, argumenta que la de festejos es una partida a la que no se puede desviar dinero de otras en caso de necesidad, de ahí que haya que presupuestarla con una cierta holgura para evitar que un gasto imprevisto se convierta después en un quebradero de cabeza administrativo y suponga que el Concello tarde más tiempo en pagar. Fátima Abal, por su parte, añade que "esa cantidad es una previsión, en la que hemos tomado como referencia lo que se gastó el año pasado en festejos. Eso no quiere decir que este año no vayamos a cambiar algunas cosas y que finalmente gastemos menos".
En líneas generales, Charlín recuerda que "frenamos la tendencia de contracción presupuestaria de los últimos años", con la subida interanual más elevada desde 2008. El presupuesto más alto desde 1985 fue el de 2004, con más de 18 millones de euros.
