El dueño de una empresa del sector de la construcción de Vilagarcía resultó herido de consideración a última hora del miércoles al verse implicado en una reyerta en el exterior de un bar de Aralde, un lugar del rural de Vilagarcía. El hombre estaba en el establecimiento y fue presuntamente agredido por otro cliente, que una vez fuera del bar le asestó dos navajazos en la espalda, según testigos presenciales.

El presunto agresor, de iniciales J.M. vecino Vilanova, que trabaja como comercial en Vilagarcía, no fue localizado ayer ni en su domicilio ni en su puesto de trabajo por la Policía Nacional. Al cierre de esta edición ni se había entregado en la Comisaría ni tampoco fue detenido, según fuentes oficiales consultadas.

Los hechos sucedieron entre las 23.15 y las 23.25 horas en Casa Champurro, un tranquilo bar del lugar de Aralde con una clientela prácticamente fija, compuesta mayoritariamente por vecinos de la aldea y sus alrededores. Al parecer, el empresario se asomó a la ventana abierta del local para saborear un cigarrillo, y en ese momento su presunto agresor empezó a increparle por no salir fuera a fumar.

El responsable del establecimiento cuenta que "en ese momento la camarera me llamó por teléfono diciéndome que había una pelea, y yo le dije que avisase a un conocido que tenemos allí cerca para echar del bar a los que estaban peleando. Allí fuera fue donde uno de ellos sacó la navaja y atacó al otro".

No obstante, la víctima no se percató en un primer momento de que había sido agredido con un arma blanca. Terminada la pelea, se quejaba de un fuerte dolor en la espalda, pero lo atribuyó a los golpes. Sin embargo, fue al entrar de nuevo en el establecimiento cuando "los que estaban allí vieron que goteaba sangre por la espalda y le avisaron", añade el gerente del local.

Ocho puntos de sutura

El hombre fue trasladado al Hospital do Salnés por otro cliente, que tenía allí la furgoneta, e ingresó en el servicio de Urgencias a medianoche. Los médicos le atendieron de dos heridas de arma blanca, que requirieron ocho puntos de sutura, y le dieron el alta sobre las dos de la madrugada.

Y mientras el empresario era trasladado al Hospital, su presunto agresor huía del lugar. Desde el establecimiento llamaron a la Policía Local de Vilagarcía, que envió a la zona una patrulla, si bien posteriormente entregaron las diligencias a la Policía Nacional, que se ha hecho cargo de las diligencias de investigación.

Persona conflictiva

El empresario herido, que prefiere mantenerse en el anonimato, declaró ayer que el hombre con el que se enzarzó en la pelea "es una persona bastante conflictiva. Alguien que lleva una navaja en el bolsillo no puede tener buenas intenciones". Un argumento que avala el dueño del bar en cuyo exterior se produjo el enfrentamiento. "El herido es una magnífica persona, que viene por aquí a menudo y que nunca ha dado problemas. Al otro en cambio ya le hemos pedido alguna vez que no vuelva por aquí porque no nos gusta su actitud, y en este bar nunca tuvimos peleas". Al parecer, los dos hombres implicados en la reyerta, de entre 40 y 45 años en ambos casos, ya tuvieron diferencias en ocasiones anteriores, aunque nunca habían llegado a los extremos de lo sucedido anteayer por la noche.

El responsable de Casa Champurro manifiesta que el miércoles J.M. sí entró en el bar "porque aunque ya le teníamos prohibida la entrada había una camarera nueva que no le conocía". El caso llegará ahora a los juzgados, tanto si el herido presenta denuncia como si no, puesto que al ser atendido en un servicio médico de unas lesiones como las suyas, el propio Hospital ya remite de oficio un parte a la Policía y al juzgado.