La Brilat aprovechó los temporales para ponerse a prueba con clima adverso

La Brilat afronta el nuevo año como terminó el anterior, sin descanso y con nuevos ejercicios de adiestramiento de las diferentes unidades que componen la unidad con sede en la base General Morillo de Pontevedra.

De hecho, en las últimas semanas los temporales no han frenado la actividad prevista y los efectivos de la Brigada han aprovechado para poner a prueba sus capacidades en condiciones meteorológicas especialmente adversas, como ocurrió con sus fusileros del Batallón Zamora o con el despliegue en el monte de Figueirido de sus unidades de artillería de mayor envergadura.

Según explican fuentes de la Base General Morillo son ejercicios “rutinarios” pero que coincidieron con estos episodios de inclemencias meteorológicas.

Los primeros realizaron en medio de intensos aguaceros ejercicios en trincheras en los terrenos de adiestramiento de la propia base en el monte de Figueirido.

Combate en bosque

Los militares practicaron operaciones de espliegue en defensiva, ocupación de los pozos de tirador, movimiento por ramales de los fosos y asignación de los sectores de tiro a los fusileros.

Cabe recordar que la Brilat es la unidad de referencia del Ejército de Tierra en lo que se refiere a combate en zonas boscosas, por lo que son los encargados de instruir en esta materia al resto de unidades españolas.

En el segundo de los casos, el Grupo de Artillería VII de la Brigada Galicia VII también se desplegó en los terrenos del campo de maniobras de la base de Figueirido para realizar actividades de reconocimiento, topografía, telemetría y meteorología.

Unas aptitudes que “son fundamentales para que la línea de piezas pueda entrar en posición y realizar una acción de fuego en apoyo directo a las Unidades” desplegadas en zona de operaciones.