Los jardines de Santa Clara se abrirán a la ciudadanía --como estaba previsto desde que el Concello compró la propiedad a la orden de las Clarisas-- pero "sin perder ese halo de misterio que el convento siempre tuvo para la ciudad", explicó este miércoles el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, al cumplirse seis meses desde que el monumento pasara a propiedad de los pontevedreses. La huerta y el claustro serán accesibles tanto desde la plaza de Barcelos como desde la calle Santa Clara, pero en el primer caso, al existir un muro protegido y que separa el jardín a distinto nivel de la plaza contigua, se estudia la forma de abrir este acceso: puerta, rampa o ascensor. Soluciones que serán estudiadas y negociadas con Patrimonio de la Xunta de Galicia.
En estos seis meses en los que el convento es propiedad municipal, más de 15.300 personas han pasado por el cenobio o por la iglesia, en la que se han celebrado distintas actividades. El interés por visitar el monumento se mantiene y, de hecho, el Concello recibe consultas sobre esta opción desde distintos puntos de Galicia, según informó el alcalde. Lores, que aseguró que "estamos maravillosamente desbordados" por el interés suscitado, avanzó que se seguirán organizando eventos culturales de todo tipo en este edificio de 750 años.
Este 1 de junio se cumple medio año desde que el alcalde de Pontevedra firmara ante notario la adquisición del convento por 3,2 millones de euros. Fue “uno de los días más importantes para la historia de la ciudad”, afirma Lores, quien destaca la colaboración abierta con la Diputación de Pontevedra para recuperar el monumento y abrirlo a la ciudadanía.
En dos semanas comenzarán los estudios arqueológicos en el recinto, ante la posibilidad de habilitar el convento como una extensión del Museo Provincial.
