Una de las investigaciones más largas y complejas activas a día de hoy en el área de Vigo está próxima a sentar a los acusados en el banquillo de la Audiencia Provincial. Y es que el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 2 de Redondela decretó la apertura de juicio oral contra una veintena de personas y una empresa –Engel Systems S.L.– acusadas de formar un entramado dedicado a vender decodificadores “pirata”: permitían el acceso supuestamente fraudulento a la televisión de pago (partidos, series, cine...). Esto posibilitaba visualizar de forma gratuita canales ofertados por plataformas tan populares como Movistar, Canal + o Bein.

Los delitos que le atribuye la magistrada, a raíz de sendos escritos de la Fiscalía y acusaciones particulares son pertenencia a organización o grupo criminal y contra la propiedad intelectual o relativo al mercado y los consumidores. El Ministerio Público solicita penas de prisión que suman 23 años y 9 meses para un total de 7 investigados, cifra que las tres acusaciones particulares –DTS Distribuidora de Televisión Digital (Canal +/Movistar), Mediapro S.L.U. y EGEDA (Entidad de Gestión de Derechos de los Productores Audiovisuales)– elevan a 19.

La Fiscalía reclama también una multa de casi 21 millones de euros a la firma Engel por “el beneficio obtenido o que se hubiese podido obtener” por la presunta retransmisión irregular de los contenidos de pago así como la “prohibición definitiva” de vender decodificadores y otros productos relacionados con la emisión de contenidos por 10 años. Esta empresa, epicentro del entramado, contaba con delegaciones en distintos puntos de España, entre ellos, Galicia. A mayores, el Ministerio Fiscal pide indemnizar a las tres entidades perjudicadas con 11,4; 2,5 y 3,1 millones de euros respectivamente.

A este respecto, la jueza requirió en este auto de apertura de juicio oral, fechado a 20 de mayo de 2021, tanto a los acusados como a los responsables civiles subsidiarios que prestasen una fianza de 195 millones “para asegurar las responsabilidad pecuniarias” en caso de una sentencia condenatoria.

El modelo de negocio investigado –tal y como se recoge en el auto de la magistrada de Redondela–, pasaba por realizar “apagones” periódicos de los servidores que emitían los contenidos gratuitos, “obligando así a los usuarios a comprar otro decodificador de la marca Engel, que tras serle introducido un nuevo firmware, les daría otra vez el acceso a la infraestructura y a los contenidos de televisión de pago de una forma gratuita”.

En el auto de procedimiento abreviado se apunta que la presunta organización delictiva se valdría de la “colaboración directa” de los responsables de foros especializados para lograrla difusión masiva de los firmwares. “Gran parte de los decodificadores fueron distribuidos mediante venta on line a través de páginas web especializadas, existiendo un conocimiento del servicio que prestaba Engel y una relación perfectamente engranada con los foros”.

Piezas separadas

Esta causa forma parte de un macroprocedimiento abierto en 2011, que suma una década de recorrido judicial y que se dividió en dos piezas separadas, una por cada presunta estructura criminal descubierta. Las investigaciones parten de una denuncia por venta de decodificadores “falsos” a través de Internet presentada contra una empresa de venta de productos de electrónica e informática que estaba radicada en Soutomaior.

En cuanto a la cantidad de decodificadores o links de TV que se habrían comercializado, en uno de los escritos de una acusación particular de esta pieza separada, un perito auditor estima que la cifra oscila entre los 20.000 y los 50.000. El primer dato se habría obtenido de las intervenciones telefónicas a los investigados durante la instrucción del caso; la segunda cifra “parte de los datos obrantes en autos acerca de los cobros a contrareembolso que recibió la trama investigada por la venta de los decodificadores”.

Claves destacadas

1 Once años de recorrido judicial La causa principal se abrió en 2011tras una denuncia en Soutomaior y se dividió en dos piezas separadas, una por cada entramado.

2 Apagones en los decodificadores La firma realizaría “apagones” en los receptores obligando a comprar unos nuevos ya alterados.

3 Foros especializados en el entramado Según el auto judicial, Engel se valía de foros especializados para distruir los firmware, que permitía el acceso de forma gratuita.