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Hierbas sanas, fragantes y mágicas

Las mujeres de la comarca guardaron durante siglos su secreto para elaborar el “cacho” de San Xoán, un ramo vegetal usado para mejorar la salud y defenderse del “mal de ojo”

Salida para recoger hierbas de San Xoán por las fincas de Poio. | // RAFA VÁZQUEZ

La Asociación Vaipolorío celebrará el próximo día 23 una salida por el río Gafos dedicada a “Herbas e rituais” de la fiesta de San Xoán. La encabezará el profesor de Ciencias Naturais de Educación Ambiental Amancio Castro, uno de los que se sorprende de la gran riqueza de patrimonio material y natural ligado a esta tradición.

Tanto que solo Vaipolorío ha contabilizado en los últimos años alrededor de 40 hierbas distintas que eran recogidas con regularidad en Pontevedra, en concreto en las parroquias ribereñas con el Gafos, en estas fechas. Para ello ha contado con el testimonio inestimable de numerosas vecinas cuyas familias conservaron durante siglos la tradición.

“Era una cuestión muy familiar, de cada casa, con mucha implicación de las mujeres”. Ellas solían ser las conocedoras de los usos medicinales de las hierbas y las incorporaban al “cacho”, un ramillete vegetal que se ponía en remojo durante esa noche.

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“Era una cuestión muy familiar, de cada casa”, explica Amancio Castro, “con mucha implicación de las mujeres”. Ellas solían ser las conocedoras de los usos medicinales de las hierbas y las incorporaban al “cacho” de San Xoán, un ramillete vegetal que se ponía en remojo durante esa noche.

El solsticio de verano marcaba un momento clave en las sociedades tradicionales, como recuerda Amancio Castro, un paso simbolizado con fuego “que eran las hogueras, más públicas, mientras que el cacho es algo más de cada familia”, señala.

Se empleaban plantas con propiedades medicinales reales, hoy ya comprobadas por la ciencia, como la manzanilla o la menta; y "un segundo grupo que se consideran mágicas, para sacar el mal de ojo”, señala Amancio Castro

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Para elaborarlo se contaba con hierbas ribereñas, como la menta salvaje, pero también con otras cultivadas como la malvarosa, el romero o la hierba luisa. “En general se empleaban dos tipos”, señala el profesor y miembro de Vaipolorío, “unas que tienen propiedades medicinales reales, hoy ya comprobadas por la ciencia, como la manzanilla o la menta; y un segundo grupo que se consideran mágicas, para sacar el mal de ojo”.

La Asociación Vaipolorío celebrará el próximo día 23 una salida por el río Gafos dedicada a “Herbas e rituais”

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También difieren las formas de uso, ya que para sumergir el cacho se empleaba “agua de alguna fuente en concreto o del pozo familiar”. Y tras el remojo en la noche de San Xoán “a la mañana siguiente uno se lava la cara con ese agua de las hierbas, muchas de ellas aromáticas”, en un ritual de significado mágico “para defenderte del mal de ojo”.

La invocación a San Xoán, añade “posiblemente se incorporó para huir de la Inquisición, y estas tradiciones ya estaban presentes mucho antes en la sociedad tradicional gallega”, cuyas mujeres se despertaban cada solsticio más fragantes y protegidas del “meigallo”.

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