“Hubo otras urgencias” , alega el concejal de Economía e Facenda de Pontevedra, Raimundo González Carballo, para justificar un retraso de diez años en el proyecto de restauración de la Casa Consistorial antigua. En 2010 se realizaba un traslado de las dependencias del Concello al edificio de la calle Michelena 30 y se anunciaba la restauración del edificio del arquitecto Alejandro Rodríguez Sesmero. Pero a punto de comenzar 2021, el deterioro del viejo Concello, al menos en su primera planta, es evidente.
Sin concretar nada, el concejal delegado de Economía anunció al ser preguntado por la cuestión que “próximamente daremos más información sobre el tema. Me consta”. Y explicó que si no se acabó antes esta reforma fue porque en esta década se presentaron otras necesidades. Así, hasta ahora se han ido arreglando las plantas baja y tercera del edificio administrativo de Michelena 30. El nuevo edificio de Ferreiros se ha llevado también otra cuantía importante de los presupuestos destinados a dependencias municipales, como recordó González Carballo.
En los presupuestos del Concello para 2021 se volverá a incluir una partida “para dependencias municipales”, en general, “como también hubo este año” , recuerda el edil, sin concretar qué partida ni con qué destino.
González apunta, por otra parte, que en el viejo edificio de la Plaza de España sí se han hecho reformas, posiblemente en cuestiones que no resultan tan llamativas a la vista, como fue la reparación de toda la techumbre, así como las ventanas del edificio.
También la parte baja del inmueble está ya reformada y, de hecho, allí se encuentran algunos departamentos municipales, como los propios servicios técnicos. “Solo falta por arreglar realmente la primera planta, todo lo demás está reformado”, asevera el edil, quien subraya que pronto habrá novedades sobre este asunto.
La Casa Consistorial construida por Sesmero entre los años 1877 y 1880 presenta en su primera planta un evidente estado de abandono, con paredes desconchadas y sucias, cables colgados y otras muchas deficiencias.
El gobierno de Miguel Lores anunció en 2009 que el edificio se iba a remodelar para convertirse en la sede institucional de la Alcaldía, acoger actos institucionales, reuniones y eventos, además de recuperar el salón de plenos.
