Pontevedra celebrará una Navidad “sin aglomeraciones”, como exigen las normas anti Covid-19 y solo se celebrarán actos al aire libre y con el aforo controlado. Pese a las restricciones que exigen las medidas sanitarias, este año también llegarán los Reyes Magos a la ciudad, pero lo harán de una forma “singular” que el Concello no ha querido desvelar por el momento.
Los servicios municipales están trabajando en la organización de estas actividades de manera que se cumplan los protocolos sanitarios y no se produzcan aglomeraciones de personas en la calle, según indicaron ayer fuentes municipales.
En todo caso la ciudad estará iluminada para animar las compras en el comercio local, teniendo en cuenta las limitaciones que se puedan introducir en su momento. Esta iluminación ya ha sido contratada a la empresa Porgesa S.A, con sede en Puente Genil, Córdoba, por un importe de 140.000 euros. Son unos 33.000 euros más que el año pasado, cuando la adjudicación se hizo por 107.085 euros.
Está previsto la instalación de rótulos luminosos en los accesos a la ciudad y arcos en las calles Oliva, Benito Corbal, Santa Clara, Cobián Roffignac, Paseo de Colón, Daniel de la Sota, Echegaray, Estribela, Fondevila, A Seca, García Camba, Joaquín Costa, Loureiro Crespo, Avenida de Lugo, Riestra, Marquesa, Michelena, Monte Porreiro, Peregrina, Pontesampaio, Rosalía de Castro, Sagasta, Virgen del Camino, Gutiérrez Mellado y Frei Xoán de Navarrete.
También se iluminarán las farolas en las calles Alameda, Santa Clara, San Antoniño, Glorieta de Compostela, Ferrería, Cobián Areal, Uxío Novoneira, Joaquín Costa, Glorieta de Loureiro Crespo, plaza de Ourense, San Roque, avenida de Vigo, Eduardo Pondal, María Victoria Moreno, Xeneral Rubín, Praza de España, Doce de novembro, Fernando Olmedo, Josefina Arruti, Estación, Estrada, Xoán Carlos I y Barcelos.
Tres grandes bolas
Asimismo el contrato incluye otros motivos de iluminación y decoración de Navidad como el alumbrado de los camelios de la plaza de Ourense, la iluminación de un árbol en la plaza de España, el imafronte del edificio de bomberos y el camión escalera, un árbol artificial de 20 metros en la Praza da Ferrería y un segundo árbol luminoso de 10 metros en un punto donde elegir; además de tres grandes bolas de cuatro metros de alto con ubicaciones aún por decidir.
