Era su primera movilización por el centro urbano, tras varias concentraciones y protestas en la avenida Juan Carlos I, y fue un "éxito". Algo más de medio millar de personas secundó la convocatoria de la Plataforma vecinal Non Crematorios Pontevedra Leste y se manifestó -desde la pasarela de Loureiro Crespo hasta la plaza de España- para reclamar al gobierno local que dé marcha atrás y no autorice la instalación de este tipo de infraestructuras funerarias a menos de 500 metros de distancia de zonas habitadas, una exigencia que implica la paralización del proyecto de crematorio que promueve Funespaña detrás del cementerio municipal de San Mauro.

Los manifestantes instan al Concello "una solución negociada" que frene lo que califican de "injusticia": la construcción de un crematorio a menos de cincuenta o sesenta metros de distancia de algunas viviendas de un barrio de 15.000 habitantes y en las proximidades de equipamientos sensibles como colegios, guarderías, parques infantiles, un conservatorio y un centro de salud.

Los vecinos de Pontevedra Leste, barrio articulado en torno a la zona de A Parda, propone que se instale el crematorio, un servicio que por otra parte consideran necesario, en un polígono industrial o al menos respetando la distancia prometida de 500 metros de cualquier zona habitada "porque fue lo que nos prometió el Concello cuando suspendió (en noviembre de 2012) las licencias" de los proyectos que estaban entonces encima de la mesa, según recordaba el portavoz de la plataforma, José Luis Calvo, que esgrime el apoyo de asociaciones de Mourente, Estrigueiras, Salcedo, la federación Teucro, Anova y grupos ecologistas.

La marcha llega dos meses después del cierre del período de alegaciones contra la nueva norma urbanística municipal que regula la ubicación de los crematorios y que solo permitiría el de Funespaña que rechazan los vecinos.

En total se presentaron 643 alegaciones contra este proyecto, casi todas instadas por la Plataforma Crematorios Non y centradas en cuestiones ambientales. La excepción la constituyen las alegaciones planteadas por la firma Tanatorio San Mauro, el tándem empresarial Alianza y Barros-Pompas Fúnebres Pontevedra y el grupo municipal del Partido Popular (PP). Precisamente ayer el portavoz de este grupo, Jacobo Moreira, se sumó a la manifestación.

Las alegaciones están en fase de resolución recordaba ayer el concelleiro de Urbanismo, Antón Louro, uno de los dos destinatarios de la protesta vecinal (el otro es el alcalde Miguel Fernández Lores), quien añadía que "hace un año y medio había un grave problema por la coincidencia de múltiples proyectos de crematorios y el Concello lo que hizo fue poner en marcha una iniciativa para bloquear los crematorios en el casco urbano y a día de hoy existe una única iniciativa que deriva de acuerdos anteriores, y que no tomó este concelleiro de Urbanismo y sí un pleno por unanimidad en el que, entre otros, se sentaba Jacobo Moreira".

Antón Louro insistió en que "estamos esperando que la Xunta regule las exigencias urbanísticas para la instalación de crematorios en Galicia" .

Por su parte el portavoz del PP, Jacobo Moreira, se suma al planteamiento de los vecinos de A Parda y apostaba por instalar el crematorio en un polígono industrial como propuso en su día. No dudó en calificar de "traición ideada por Lores y Louro" la aceptación de instalaciones de este tipo con una franja de separación de solo 50 metros.