Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Una segunda oportunidad para volar desde Ourense

El Centro de Recuperación de la Fauna de Ourense devuelve la vida a animales salvajes heridos hasta su perfecto estado de salud

El veterinario Juan José Gómez enseñando la lechuza a los niños y niñas. | // FERNANDO CASANOVA

Volar para regresar al hábitat natural. Los incendios devastaron espacios naturales y también calcinaron animales. Ayer, las manos de Gabriel Alén soltaron vida ante la atenta mirada de los menores de un campamento y ante la retina de las llamas en los montes ourensanos.

Tres aves rapaces volvieron a su hábitat natural, desde la urbanización Veiga de Abaixo de Pereiro de Aguiar. Las llamas de los incendios de los últimos días son el símbolo de una crisis medioambiental en la que, las principales víctimas son la flora y la fauna de los bosques de Galicia. Tan rica y ahora tan herida.

Los hospitales de la fauna autóctona, como el Centro de Recuperación de la Fauna en Ourense, dan una segunda oportunidad a los animales para recuperarse de sus heridas y volver al lugar en el que habitaban. En definitiva, una segunda oportunidad para volver a volar. En Galicia existen otros tres además del de Ourense, como son el de Oleiros (A Coruña) el de Veral ( Lugo) y el de Carballedo (Cerdedo-Cotobade).

Su principal cometido consiste en el cuidado y la rehabilitación de las especies de fauna silvestre autóctona que no pueden subsistir por sí mismos en el medio natural. Para esa reintegración en el medio ambiente, con un equipo multidisciplinar formado por especialistas de diferentes ramas que trabajan por y para el medio ambiente como veterinarios, biólogos, ingenieros técnicos forestales e ingenieros forestales.

El especialista de medio ambiente y veterinario, Juan José Gómez, explicó el proceso de recuperación de los ejemplares que llegan a los centros y destacó los esfuerzos en la recuperación del águila real. El motivo principal de los ingresos son por los traumatismos que sufren las aves al caer de su nido. La Consellería de Medio Ambiente se encarga de llevar a los animales heridos hasta los centros donde son valorados. Durante el proceso, en las cámaras de vuelo observan las capacidades del animal para volar y alcanzar su comida y, finalmente, cuando estas se encuentran en perfectas condiciones se les da el alta para que se reintegren en su hábitat.

Desde el municipio de Pereiro de Aguiar, las aves vuelan hacia la depresión del río Miño para volver con las de su misma especie. A los pájaros se les pone una anilla identificadora para que sea posible acceder a sus datos.

En los centros de recuperación “por lo general cualquier animal salvaje se recupera” aunque para el halcón peregrino que se soltó en la jornada de ayer, fue un proceso más difícil ya que, llegó “bastante débil y desnutrido”. Aquellos que no llegan a recuperarse completamente se ceden a otros centros de cría en cautividad o a parques zoológicos.

No tocar animales

Es importante que los ciudadanos recuerden que no pueden coger a los animales cuando se topan con ellos. Lo ideal es que llamen al número de emergencias y sigan las instrucciones que les dan. “Cuando la gente se encuentra una cría de corzo sola en un algún lugar, no la pueden tocar, porque la madre lo deja normalmente protegido cuando va a comer y si un ser humano pensando que hace bien lo coge, a ese animal, automáticamente su madre lo va a rechazar” apunta Juan José Gómez.

Compartir el artículo

stats