El pasado 20 de diciembre entraba por primera vez a Ourense el Tren de Alta Velocidad, marcando un antes y un después en el transporte ferroviario con la Meseta que, desde entonces, une la ciudad de As Burgas con Madrid, en poco más de dos horas y cuarto.
A punto de cumplirse tres meses de la llegada del AVE, los negocios del barrio de A Ponte próximos a la Estación Empalme, afirman que “comenzamos a notar un incremento de clientes de fuera, en especial los fines de semana, que vienen en AVE desde Madrid”, según indican en un par de firmas hoteleras de la zona.
“No solo ha sido la llegada del AVE, también se nota mucho la instalación en el barrio de A Ponte de la nueva estación de autobuses, al lado de la del tren. Ahora nos llegan clientes que igual se llevan el pan artesano y las bicas gallegas para el pueblo, que los turistas que se los llevan cuando van de regreso a Madrid”, explica Ángeles Vidal, de Panadería Sabucedo, próxima a la intermodal.
En el caso de los taxistas de la estación, las opiniones son divergentes. Unos son pesimistas –“máis ou menos temos os mesmos clientes”, dice uno– pero la mayoría nota el cambio. “Tenemos más movimiento por el AVE y porque estar al lado de la estación de buses”, afirman el resto de compañeros.
“Creemos que, con el tiempo, esto va a ir a más, e incluso tenemos algún cliente que llega desde Barcelona, después enlazar dos Aves –de Barcelona a Madrid y de Madrid a Ourense– porque pueden hacer un viaje que antes era de 11 horas de duración en tren, en poco más de cuatro horas”, explica indica un profesional del taxi que, como el resto de los consultados, prefiere no dar su nombre.
¿Y un centro comercial?
Incluso va más allá: “Es posible que aquí pudiera funcionar un pequeño centro comercial, de ropa, souvenirs y demás, porque la gente podría hacer sus últimas compra antes de subir al tren”, propone el taxista.
Lo que si urgen los taxistas es algún tipo de cubierta en el entorno de la explanada de la estación antes del verano, “para protegernos tanto a nosotros, como a los viajeros, cuando hace mucho calor, o cuando llueve”, afirman.
En el Hostal La Rotonda, un clásico del barrio pontino, situado al lado de la estación, notan que “además de los trabajadores de empresas que tenemos durante la semana, nos llegan ahora personas de Asturias o de León. Todavía es una subida pequeña, pero nos preguntan mucho por las termas”, afirma Francisco González, encargado de La Rotonda. Su compañera, Marly Sabala, ratifica que “hay algo más de movimiento y reservas los fines de la semana”. Los negocios de hostelería del entorno notan también más clientes, que prefieren hacer su espera por el tren o el bus, fuera de la estación.
Fuentes del Hotel Alda Ourense, ubicado en A Ponte, señalan que “solemos trabajar con clientes de empresa, como Renfe, Adif, Ferrovial... pero notamos ya más turismo que llega con el AVE. Suponemos que aumentará n Semana Santa, pero nosotros ya ofrecemos un paquete con estancia en el hotel y entrada al Centro Termal Outariz, y tienen buena respuesta”, afirman.
“Preguntan por las bicas y la empanada; les encanta el pan gallego”
“La gente que viene de fuera pregunta mucho, por la empanada, las bicas y les encanta el pan gallego”, explica Ángeles Vidal, de Panadería Sabucedo Sus productos artesanales atraen al turista que baja de la estación “y a los ourensanos que lo llevan a Madrid”.
“Antes de reservar habitación, preguntan si funcionan las termas”
Este local histórico del barrio pontino reconoce que “empezamos a ver más gente de fuera, no solo los obreros que vienen durante la semana” y que una de las preguntas que les hacen antes de reservar la habitación “es si ya están funcionando las termas”, indican.
“Notamos más turistas en el hotel los fines de semana”
Yoly Yáñez, del Hotel Alda Estación Ourense, también detecta en estos meses “más turistas de fin de semana, que llegan desde Madrid”. La empresa Alda, con más de 50 hoteles en España, ofrece además paquetes combinados de habitación en Ourense, y entrada a las termas privadas de Outariz.
