Tras la confusión inicial y algunas quejas por falta de información, los bares y restaurantes de Ourense han empezado a adaptar sus establecimientos a los nuevos protocolos recogidos en el plan de hostelería segura aprobado por la Xunta para reforzar las medidas antiCOVID en este sector y facilitar el rastreo de contactos si se registra un positivo. Estas nuevas medidas, de cumplimiento obligatorio para el hostelero, incluyen la implantación de un sistema de registro de clientes a través de un código QR.
El protocolo se pone en marcha este viernes y algunos locales están ya preparados. Es el caso del Jam Session, en Ramón Cabanillas, cuyo propietario, Tito Paradelo, se muestra muy a favor de este sistema de control. “Todo lo que sea prevención es bueno y al hostelero no nos cuesta nada”, señala en referencia a la implantación del código. “Es muy fácil, ayer llamé a la contable, le di los metros cuadrados del local para calcular los aforos y me lo hizo al momento”. Enseguida recibió en su correo los carteles con los datos que desde el viernes se deben mostrar visibles en el local y el código. Sencillo, dice Paradelo, que además de valorar las ventajas de este registro a la hora del rastreo, ve otro aspecto positivo para el hostelero: “Las medidas que tengamos que implantar de manera obligatoria nos quitan de enfrentarnos nosotros al cliente”, afirma.
El sistema es fácil, explica, basta con descargarse una aplicación en el móvil, un gesto sencillo que la mayor parte de la población domina. El problema se puede presentar para las personas mayores que no hacen un uso habitual de las tecnologías. “En mi caso, tengo tres mayores en casa y les descargamos nosotros la aplicación, usarla después es muy sencillo porque solo hay que acercar el móvil”, apunta.
El delegado territorial de la Xunta, Gabriel Alén, visitó ayer este local por ser un de los que ya ha implementado el protocolo completo que se exigirá a partir del viernes. El objetivo, dijo, es garantizar que se cumplen las medidas, en especial el control de la capacidad de los locales, las distancias de seguridad y el uso de mascarilla. Destacó que desde el viernes será obligatorio contar con un cartel visible en el exterior de los establecimientos que informe de la capacidad máxima del local y el aforo, tanto en el interior como en el exterior según la normativa vigente. También deberán facilitar el acceso a los clientes del código QR para que puedan registrar su presencia.
Alén apeló a la responsabilidad y reclamó “prudencia” ante las imágenes del pasado fin de semana de terrazas llenas y aglomeraciones. Pide no dejarse llevar por el “falso optimismo: No queremos una cuarta ola”, apuntó.
