El Obispado de Ourense anunció ayer que la Semana Santa se celebrará de puertas adentro, en los templos, por lo que se suspenden las procesiones y todos los actos que tradicionalmente tienen lugar en la vía pública.
“Teniendo en cuenta el nivel de incidencia de la pandemia del COVID-19 en el momento actual, se informa de que este año no se celebrarán las tradicionales procesiones de Semana Santa, ni ningún acto o manifestación de culto en la vía pública”, indica la Diócesis ourensana. Añade que las celebraciones litúrgicas de Semana Santa se desarrollarán en los templos, cumpliendo las limitaciones de aforo vigentes y todas las medidas de seguridad, “siendo únicamente las procesiones y actos que se desarrollan en espacios públicos los que quedan suspendidos”, aclara.
En este sentido, el Obispado invita a los fieles a participar “de modo consciente, fructuoso y activo en las celebraciones litúrgicas, especialmente las del Triduo Pascual”. Una invitación que se hace extensiva también, añaden, “a la vivencia efectiva de la caridad, tan necesaria en estos momentos”.
Por su parte, el Obispo de Ourense, Leonardo Lemos, anima a los fieles a “intensificar la oración, con la intercesión de San José en este su Año Santo, pidiendo por todos los que sufren a causa de la pandemia y por el final de la misma”.
