El uso de nuevos materiales aislantes y la incorporación de tecnología led, en el caso de la iluminación de las escaleras y zonas comunes del edificio, conseguirá que el ahorro medio en la factura energética “se reduzca en torno al 36%”, explica Miguel Ángel Añel, aparejador de la obra, puesto que un edificio bien aislado supone reducir los gastos tanto para enfriarlo en verano, como para calentarlo en invierno.
Los nuevos materiales de construcción permiten además posibilidades casi infinitas, siempre que sean elegidos y acorde al modelo de restauración que se plantee. En el exterior son paneles envolventes de composite de aluminio, lo que unido a una capa de un material aislante Isover de unos 60 milímetros, pegado a la antigua fachada , hace que se cumplan los objetivos de viviendas bien aisladas y con eficiencia energética”, explica Miguel Ángel Añel.
De los años 70
El edificio del número 29 de Valle Inclán era uno de esos inmuebles de los años 70, que engrosaban ya la lista del feísmo arquitectónico por obsoletos e invisibles para el viandante. Un proyecto de mejora de 400.000 euros, acometido por la comunidad de propietarios, de los cuales la Consellería de Medio Ambiente aportó 140.000, con cargo a una línea de reforma y mejora energética para inmuebles, anteriores a 2007, no solo lo ha convertido en un ejemplo de arquitectura intemporal, sino de ahorro en la factura de la luz.
“Es una delicia venir a Ourense y ver edificios hermosos como este”, señaló la conselleira de Medio Ambiente, Territorio y Vivienda, Ángeles Vázquez, durante su visita a la obra, acompañada por el delegado de la Xunta en Ourense, Gabriel Alén y técnicos de la empresa de la ciudad, Añel Pato, que hizo la obra.
Ángeles Vázquez destacó que la nueva línea de ayudas de eficiencia energética en edificios ya existentes , “está despertando gran interés entre los ciudadanos” , tal y como demuestran las más de 500 solicitudes inscritas tan solo en el primer mes de convocatoria.
Presupuesto de 17 millones
Este programa de ayudas para actuaciones de mejora de los inmuebles que están reguladas por Real decreto de 4 de agosto, prevé un presupuesto global de 17 millones de euros, de los cuales 8,5 millones de euros serán solo para el presente ejercicio”, Ángeles Vázquez recordó que pueden solicitar la ayuda “tantos propietarios únicos, como comunidades, siempre que el 70% sean para residencia”. El 31 de julio remata el plazo para solicitar este tipo de ayudas cuyo objetivo es mejorar la vida útil de su edificio. Las viviendas unifamiliares también pueden optar a estas ayuda siempre que hagan uso en a obra sistemas de ahorro en las instalaciones térmicas de calefacción, climatización, refrigeración, ventilación y agua caliente sanitaria o iluminación. En todo el programa, se concedieron 668 ayudas, para un total de 4.057 viviendas, que suman 10,4 millones.
“Se reduce un 36% el gasto de luz y calefacción”
El uso de nuevos materiales aislantes y la incorporación de tecnología led, en el caso de la iluminación de las escaleras y zonas comunes del edificio, conseguirá que el ahorro medio en la factura energética “se reduzca en torno al 36%”, explica Miguel Ángel Añel, aparejador de la obra, puesto que un edificio bien aislado supone reducir los gastos tanto para enfriarlo en verano, como para calentarlo en invierno.
Los nuevos materiales de construcción permiten además posibilidades casi infinitas, siempre que sean elegidos y acorde al modelo de restauración que se plantee. En el exterior son paneles envolventes de composite de aluminio, lo que unido a una capa de un material aislante Isover de unos 60 milímetros, pegado a la antigua fachada , hace que se cumplan los objetivos de viviendas bien aisladas y con eficiencia energética”, explica Miguel Ángel Añel.
