La reciente puesta en marcha del tramo del AVE entre Zamora y Pedralba, que aporta 110 kilómetros con tecnología ERTMS de nivel 2, convierte a la línea Madrid-Ourense en una de las mayores de España en señalización y comunicaciones con este sistema de mando y control de trenes europeo.
Desde Madrid Chamartín hasta Pedralba pasa a disponer de 340 kilómetros de la tecnología unificada que permite que los trenes alcancen su velocidad máxima, y que aumenta la seguridad, capacidad y regularidad de las líneas.
El grupo francés Thales fue el encargado de la instalación del sistema de mando europeo, y aportó además equipos para el control de tráfico, comunicaciones fijas y afecciones a la línea convencional, incluido el suministro de los nuevos enclavamientos electrónicos de La Hiniesta, Puebla de Sanabria y Pedralba.
También suministró contadores de ejes para detección segura del tren, señales laterales de tecnología LED, accionamientos de todos los desvíos de la línea y detectores de caída de objetos a la vía en los puentes y bocas de túneles.
Thales ha participado en el despliegue del AVE en tres de las cuatro provincias gallegas. En Ourense intervino en consorcio con Ferrovial en la adaptación de la playa de vías y andenes de la estación, para hacer compatible la explotación convencional de la terminal con la llegada de los trenes de alta velocidad. Instaló el nuevo enclavamiento electrónico e hizo las modificaciones en los controles de tráfico centralizado.
