J.A.F.G., de 50 años, se declaró culpable de un delito de robo con violencia en las personas y uso de instrumento peligroso cometido el 17 de enero de 2020 en una farmacia de la calle Marcelo Macías. El acusado declaró por videoconferencia después de un traslado de la cárcel de Pereiro donde estaba a la de Bonxe en Lugo, por una pelea.

El Ministerio Público solicitaba una pena de 5 años de prisión. Una condena que fue rebajada por un atenuante de consumo de drogas hasta los 4 años y 3 meses de prisión, que el inculpado aceptó. Durante la conexión de su declaración, J.A.F.G. definió su vida como "un delito" y se conformó con la pena alegando "¡qué remedio!". También hizo hincapié en la situación familiar que está viviendo después de que su madre matase a su hermano en la residencia de personas mayores de Barrocás y se suicidara con metadona al día siguiente. "Me hundo ilustrísima, en cualquier momento puedo atentar contra mi vida".

Una tragedia

La madre de "Tarzanín", apodo del hermano ingresado en una residencia y conocido por las fuerzas del orden por un historial delictivo, fue el 12 de enero a ver su hijo a la residencia ourensana de Barrocás como hacía casi a diario. En dicha visita, la progenitora le suministró metadona y esperó hasta que el personal del centro detectó que "Tarzanín" sufría una insuficiencia respiratoria. Rápidamente llamaron a los servicios de emergencia para su traslado al Complejo Hospitalario de Ourense (CHUO) donde murió al día siguiente, el 13 de enero.

El mismo día que suministró la metadona a su hijo, la madre se quitó la vida con diversas pastillas y droga en su domicilio, dejando una nota de despedida. Madre e hijo murieron el mismo día y la autopsia reveló metadona en el cuerpo de "Tarzanín". Fue J.A.F.G. quien encontró el cuerpo sin vida de su madre en el domicilio familiar.

Cuatro días después de la tragedia familiar, el 17 de enero, J.A.F.G. se dirigió a la farmacia de la citada calle de Marcelo Macías con la intención de obtener un patrimonio ilícito y perturbar el ánimo de las farmacéuticas, al mismo tiempo que le dice que le den el dinero de la caja registradora.

Según el escrito de acusación, el condenado dijo que "yo tengo que hacer esto porque me quiero ir a la cárcel y total a ti este dinero te lo devuelven, lo siento pero estoy pasando por una situación familiar muy mala". Consiguiendo con ello 150 euros con los que huye del lugar.

El condenado ya había cumplido una pena de 3 años y 6 mees de prisión por sentencia firme de 28 de septiembre de 2016 y extinguiéndose el 15 de octubre de 2019.

J.A.F.G., con problemas con sustancias estupefacientes, solicitó al Concello de Ourense que pagase los gastos del entierro de su madre y de su hermano al carecer de recursos económicos.

Ayer, J.A.F.G. mostraba su conformidad con la condena y su inculpación en los hechos, sin olvidar la tragedia familiar que le "empujó" a llevar ese robo. Con un largo historial delictivo, como su hermano, tendrá que cumplir una nueva condena en Bonxe(Lugo) o en Pereiro de Aguiar.