La intervención del portavoz popular, José Araújo, cumplió el objetivo, que no era otro que encender la llama de la polémica. Y sin hacer alusión expresa a los argumentos optó por la metáfora de un "gran barco", la arena del desierto, el agua que se necesita para navegar y lo que "nada aporta, DO, y el señor Jácome".
El portavoz socialista, Vázquez Barquero, elevó la intensidad del discurso, y después de calificar de "frivolidad" la intervención de Araújo, que acuñó como "un mal cuento de verano", lo acusó de "faltar al respecto" tanto a los presentes en el pleno como a los ciudadanos. Y lamentó que "no defienda la gestión de su grupo".
Por su parte, Jácome dijo que era "impresionante" lo dicho por Araújo, al que recordaba que "no se me viene a juzgar a mí, sino al alcalde", y rechazó que sus argumentos "sean falsos", para proclamar: "En qué manos estamos".
Pero con anterioridad, la tensión se produjo cuando el alcalde llamó al orden a Jácome "por un insulto grave", que el portavoz de DO negó, y ante el intento de no parar el tiempo, amenazó al regidor con llevarlo al juzgado. Al final, Jesús Vázquez aseguró que "es una más de Jácome".