-¿Qué futuro le espera a la musicoterapia en España?

-¿Qué papel juega la ética profesional en todo esto?

-Es muy importante, sobre todo por la situación en la que se encuentra la profesión, que no está reconocida. Tenemos que informar a la población de que existe, de que hay especialistas que han estudiado para eso. Estás jugando con la salud de las personas, sea alguien con patología o no. Mucha gente cree que la musicoterapia es solo música clásica o que hay que saber de música o tocar un instrumento, y no es así.

-¿Tardará mucho en ser reconocida la profesión en España?

-Es algo reciente para nosotros, ya que, a España, llegó en los años 80. Hace tiempo, igual te diría que mucho. A día de hoy, creo que podría lograr ser reconocida a corto plazo. Se están empezando a ver cuáles son los avances y su importancia para la sociedad, poco a poco, comienza a ser más valorada. Actualmente, está más presente en el sector privado y en asociaciones, en el ámbito público no está tan visible.