La Guardia Civil detuvo a E.R.S., de 26 años y vecino del concello ourensano de Esgos, como presunto responsable de un delito de quebrantamiento y otro de hurto. La detención se produjo en el mediodía de miércoles por hechos que tuvieron lugar el pasado 30 de abril, cuando el detenido, según información del instituto armado, se personó en la vivienda de su progenitora, pese a tenerlo prohibido por una orden de alejamiento en vigor. Presuntamente, el joven se apoderó de 60 euros en efectivo y de una tableta electrónica.

Asimismo, el instituto armado atribuye al detenido un segundo delito de robo con fuerza en una iglesia de Esgos, cometido durante la noche del 3 de mayo. El joven, presuntamente, se hizo con el dinero del cepillo. Las diligencias fueron remitidas al juzgado de Instrucción Número 1 de Ourense, que estaba esta semana en funciones de guardia.

Por otra parte, en Ribadavia, la Guardia Civil ha denunciado como investigada a C.R.P., de 49 años de edad y vecina de Leiro, por un supuesto delito contra la seguridad del tráfico. La mujer fue sorprendida conduciendo un vehículo en la carretera nacional N-120, con una tasa de alcohol que superaba en más de tres veces la permitida.