Ourense supera la media gallega en incidencia del cáncer colorrectal, que es el segundo tumor más frecuente en mujeres detrás del de mama y el tercero en hombres después de los de pulmón y próstata. Además es la segunda causa de muerte por cáncer en ambos sexos, por lo que la Consellería de Sanidade ha decidido implantar un programa de detección precoz en toda Galicia que empezará por Ourense para extenderse al resto de la comunidad y reducir la mortalidad por esta patología un 35%. Tras una experiencia piloto en 2013 en el área sanitaria de Ferrol con resultados "francamente satisfactorios", según ayer mismo explicó la titular de Sanidade, Rocío Mosquera, la Xunta quiere ponerlo en marcha en toda Galicia con el objetivo de reducir su impacto al igual que ha ocurrido con el cáncer de mama, cuyo cribado, dijo la conselleira, "es el mejor de España e incluso de Europa". En este caso, la prueba consiste en un test de sangre oculta en heces, con un intervalo entre exploraciones de dos años.

La implantación se estrenará en el Área de Xestión Integrada de Ourense, donde la gerente Eloína Núñez reunió al personal sanitario para presentar los detalles del programa y explicar que la experiencia en Ferrol permitió elevar del 14 al 52% el diagnóstico de este tumor en el estadio I, una fase en la que la supervivencia alcanza el 90 por ciento.

La directora xeral de Saúde e Innovación, Sonia Martínez, indicó que si se trasladan los resultados obtenidos en Ferrol a la población diana de Ourense, se estima que durante los dos primeros años de aplicación de este programa de cribado se detectarán en esta provincia 206 casos de cáncer colorrectal. Teniendo en cuenta las recomendaciones de la estrategia en cáncer del Sistema Nacional de Salud, la iniciativa se centra en personas con riesgo medio de padecer este tumor, esto es, la población de 50 o más años sin otros factores de riesgo personal o familiar.

Siguiendo esta indicación se establece una población diana de hombres y mujeres de 50 a 69 años de forma que el censo invitado a participar en Ourense es de 87.962 personas, si bien la consellería calcula que poco más de la mitad se someterán a estos test que, aclara, tienen carácter voluntario. De esos 46.894 hombres y mujeres que se sumarán al programa, se calcula que se realizarán 2.714 colonoscopias de las que 206 arrojarán un resultado positivo en cuanto a la presencia del tumor, y otras 1.700 aproximadamente se diagnosticarán como ademonas, de los cuales 404 serán de alto riesgo canceroso, 680 de riesgo intermedio y 516 con bajo riesgo.

Tanto la directora xeral como la conselleira destacaron que en Ourense, la tasa de mortalidad por este cáncer está por encima del promedio gallego. Así, en el 2012 la incidencia en hombres fue de 44,6 defunciones por cada 100.000 habitantes y en mujeres de 38, mientras que en Galicia este dato cae al 37,9 y 27,8, respectivamente. Mosquera matizó que se desconoce la razón por la que hay una mayor mortalidad por este cáncer y desde el área integrada indican que para explicar la incidencia diez puntos por encima de la media hay que tener en cuenta factores genéticos o ambientales, pero también el envejecimiento de la población e incluso el trabajo de investigación y registro realizado en los últimos diez años por el servicio de Digestivo del CHUO. En esta línea, la conselleira destacó que "el incremento de incidencia contrasta con una mortalidad estabilizada, sin duda debido a las mejoras en los tratamientos y al diagnóstico precoz".

Estos programas, recalcó Sanidade, consiguen aumentar las tasas de curación de los cánceres colorrectales y la supervivencia de los pacientes, así como mejorar su calidad de vida y la utilización de tratamientos menos agresivos. Por otro lado, también posibilitan disminuir la incidencia de esta patología, dado que se detectan y se extirpan las lesiones premalignas evitando que evolucionen a cáncer colorrectal.

Primeras citas en mayo

La directora xeral avanzó ayer que las primeras cartas empezarán a enviarse a los domicilios de la población diana en abril. Los que deseen participar recibirán el material necesario para la toma de la muestra y las instrucciones para recogerla y depositarla en el centro de salud, donde la remitirán al laboratorio del hospital para su análisis. Aquellas que tengan un resultado positivo serán citadas en la consulta de su médico de atención primaria para explicarles su significado y la necesidad de realizar una colonoscopia para descartar o confirmar lesiones malignas. La previsión es empezar a citar en mayo, y en junio realizar las primeras colonoscopias.