Ourense es la tercera diputación más cumplidora según el ranking de 45 administraciones provinciales bajo la lupa de Transparency International España. Solo el redondeo la aleja de la perfección, con una valoración global de 98,8 puntos sobre 100. La cumbre de la transparencia la ocupan, de momento, las instituciones de León y Valladolid. La media estatal no llega a 70.

La rendición de cuentas y el compromiso ético, que tanto PSOE como BNG refutan llegando incluso a acusar al presidente de ocultar su verdadero patrimonio, es una idea fuerza omnipresente en los discursos de José Manuel Baltar. Diferenciado de su padre y predecesor en políticas como la de personal y la financiera, -algo que, igualmente, la oposición relativiza- también quiere distanciarse del expresidente en los modos. Aunque cumplir con el objetivo saque a la luz datos que puedan levantar polvareda en tiempos de crisis.

Por segundo año consecutivo, la Diputación de Ourense ha difundido los sueldos del círculo de confianza del presidente Baltar. Los cuatro consejeros nombrados a dedo suman más de 161.000 euros en salarios anuales, según la relación que puede consultarse en la web provincial. El promedio casi duplica la ganancia media por trabajador en España (22.726,44 euros, según el INE). La oposición incrementa el peso real de sus salarios para las cuentas de la Diputación hasta "aproximadamente los 200.000 euros" anuales, contabilizando el porcentaje de sus cotizaciones sociales.

A su llegada al poder en febrero de 2012, Baltar hijo cambió la cara al despacho que su padre apenas tocó en 22 años y además eligió a su entorno cercano. Los asesores y personas próximos a su progenitor fueron relegados. El presidente seleccionó a sus hombres de confianza. Fichó a dos en 2012 y a otros dos en 2013.

Los últimos dos nombramientos sirvieron a la justicia para cuestionar la legalidad del ERE que, simultáneamente a estos fichajes o a subvenciones para deportes, condujo al despido de 25 indefinidos.

En su primer año al mando, Baltar designó al exarbitro Bernardino González Vázquez, concejal del PP en Ourense, como "asesor de política deportiva" del grupo C-1. En 2014 percibirá 25.760,24 euros, idéntico salario que César Manuel Fernández Gil, nombrado en 2013 como "asesor de política cultural". Es filósofo de formación y portavoz del grupo municipal del PP de Ribadavia.

Los consejeros con mayor salario son Fernando Antonio Rodríguez Méndez, nombrado "asesor de comunicación", del mismo grupo y una retribución de 44.614,64 euros; así como al abogado José Jesús Cudeiro Mazaira, que percibirá 65.020,98 euros por sus funciones como "asesor técnico de presidencia" del grupo A-1. Mazaira era el gerente de la extinta sociedad urbanística provincial, UrbaOurense, que el presidente cerró en una de sus primeras medidas. José Luis Baltar había incorporado a este exdirector xeral de la Xunta con una supuesta cláusula 'anti-despido': 220.000 euros.