El incendio detectado en la madrugada de ayer en el garaje de un edificio del barrio de A Ponte obligó a desalojar a más de medio centenar de vecinos del edificio de ocho plantas en el que se produjo el fuego, calcinó cuatro coches y ocasionó cuantiosos daños materiales en los restantes vehículos estacionados, así como en los tres sótanos de garaje, con un total de 258 plazas que tiene el edificio, que quedaron tiznadas por el humo. El fuego afectó además a la red eléctrica y al suministro de agua del edificio, daños que a última hora de ayer continuaban evaluando los peritos de las aseguradoras.

Todo comenzó a las 5 de la madrugada de ayer cuando, según fuentes de la investigación, una cámara de control callejero de la Policía Local detectó que salía una fuerte humareda del edificio número 2 de la Avenida de Marín, que hace esquina con la calle Alfredo Brañas (en la carretera de Oira).

De inmediato se puso en marcha un plan de emergencia en el que participaron todas las fuerzas de seguridad, y mientras la Policía Local avisaba a los bomberos para tratar de sofocar el incendio y se desplazaban a la zona varias dotaciones del Cuerpo Nacional de Policía y ambulancias del 112, otros agentes iban alertando primero a través del portero automático y luego con llamadas puerta a puerta, a las 28 familias que viven en el edificio afectado para que abandonaran la casa.

La Policía animó luego a los vecinos a alejarse del inmueble y a situarse en las inmediaciones del Puente Nuevo y acordonaron el edificio para evitar riesgos a personas ante la posibilidad de que explosionaran los depósitos de gasolina de los vehículos estacionados en el garaje.

El desalojo causó momentos de tensión, dado que la mayoría de los vecinos que dormían a esa hora despertaron sobresaltados por el ruido de un timbre de madrugada. También se produjeron escenas de nerviosismo entre algunos vecinos de avanzada edad o con problemas de movilidad, que tuvieron que sortear la calle a pie a través de la escalera, al desaconsejarse el uso de ascensor en caso de incendio.

A la espera de los resultados de la investigación que realiza la Policía Científica, se cree que el fuego pudo originarse a causa de un cortocircuito en el interior de unos de los cuatro vehículos calcinados, en concreto en un vehículo nuevo y de alta gama.

Las altas temperaturas y la fuerte humareda que generó el fuego en el interior del garaje, causaron importantes daños por alcance en decenas de vehículos próximos al foco del incendio, y dejaron averiada la luz eléctrica, por lo que los bomberos tuvieron que actuar en condiciones extremas de oscuridad, falta de ventilación y con máscaras anti gas. El fuego quemó también también las tuberías de PVC de las red del agua lo que provocó que a última hora de ayer, se desaconsejara a los vecinos abrir los grifos de sus viviendas.

Los vecinos no pudieron regresar a sus casas hasta pasadas las 7.15 horas de ayer, pero el acceso a los garajes se retrasó hasta pasada las 4 de la tarde en tanto se liberaba el fuerte humo y se garantizaban que no había riesgos por los usuarios. Ya bien entrada la noche quedaban en marcha las arduas labores de limpieza de los garajes.