Ourense dejó de ser una de las cinco provincias españolas donde nunca tocó el Gordo navideño. Ayer, y aunque en pequeñas dosis, la suerte pasó por la provincia y dejó un total de 7.500.000 de euros en premios, de los cuales 3.600.000 euros llegaron a través de la serie vendida en Allariz, y los 3.900.000 restantes de la mano del número de aproximación a el Gordo, el 32.366, vendido íntegramente en la capital.

La administración de Lotería número 1 de Allariz, que regenta Perfecto Fernández, vendió diez décimos del 32.365, premiado con 300.000 euros cada uno, lo que se tradujo en tres millones de euros en premios.

Pese a la algarabía reinante en esta administración, ubicada en Galerías Oliveira de la villa de Allariz, donde no faltaron cava y abrazos en torno al perplejo lotero, sólo transcendió el nombre de uno de los agraciados, Francisco Piñeiro, "Farruco", entrenador del Club Deportivo Allariz. El décimo premiado se lo había regalado su madre, fallecida hace cuatro meses.

Según el lotero "el resto de décimos premiados podrían estar en Euskadi o Asturias pues los vendimos durante el verano a los emigrantes que pasan sus vacaciones en Allariz"

Otro pellizco del primer premio de la Lotería de Navidad se quedó en el Restaurante Ateneo, en O Reino, que regenta Francisco Muñoz Pérez. Juan y su hija Sonia tenían dos décimos que les mandaron del País Vasco, por lo que se llevaron 600.000 euros en premios.

Sin embargo, mientras en Allariz había saltos de júbilo y hasta el alcalde, el nacionalista Francisco García, se congratulaba de que "el Gordo llegue por fin a Ourense, y lo haga por orden alfabético, es decir empezando por la A de Allariz", en el restaurante Ateneo, Juan Francisco Muñoz vivió con una increíble racionalidad su premio "seguiría trabajando aunque me tocaran 5.000 millones", aseguraba, "es lo que se hacer".

Pero la administración que repartió más dinero fue la de Enrique Muguerza, en la avenida de la Habana de Ourense, nada menos que 3.900.000 euros repartidos en 1.950 décimos, agraciados con 2.000 euros cada uno, del 32.366, el número de aproximación a el Gordo, vendido íntegramente por esa oficina. La mitad de esas 1.950 participaciones se fueron para un bar ubicado en el polígono industrial de San Cibrao das Viñas, por lo que es de suponer que se repartió entre muchos trabajadores de la zona.