De los 34 incendios que registró ayer Galicia, la provincia de Ourense fue la más castigada con 16, diez de los cuáles permanecían activos y sin controlar a última hora de la tarde de ayer.

A última hora permanecían activos los fuegos declarados en Entrimo, Lobios, Viana, Boborás, Cualedro, Monterrei, Riós, Bande, Baltar y Vilardevós, mientras que los equipos de extinción habían conseguido sofocar las llamas en Verín, Vilamarín, Xunqueira, Cualedro, Maceda y Castrelo do Val, según datos de la Xunta de Galicia.

Uno de los incendios más virulentos de la jornada, junto con el que afectó al Parque Natural de Baixa Limia-Serra do Xurés, fue el de Viana do Bolo, que llegó a extenderse al término municipal de Barjacoba, en Zamora, y que afectó a zona de arbolado y matorral. En su extinción participaron tres técnicos, seis agentes, dos aviones anfibios de carga en tierra, dos helicópteros, cuatro cuadrillas, dos autobombas, un retén de maquinaria y una unidad móvil de meteorológica y de transmisiones.

Importante fue también el incendio declarado a las 22:00 horas del martes en Lobios, que ayer permanecía activo y afectaba a una zona de monte raso y de difícil acceso. Las llamas de este incendio afectaron al parque do Xurés y los pueblos más castigados por las llamas fueron Sampaio, San Martiño y San Miguel de Lobios. De todas formas, el alcalde de Lobios, Benito Vázquez, informaba que las llamas no afectaron a ningún inmueble.

Al igual que el alcalde de Entrimo, Vázquez lamenta "la pérdida medioambiental" que acarreará el incendio en la zona y ya por la mañana reconocía que "es posible que se tarde en apagar el fuego por el tipo de terreno", con zonas en las que sólo pueden trabajar los medios aéreos.

En espera de las primeras estimaciones de superficie quemada, el alcalde manifestaba que "ha ardido una gran superficie", sin atreverse a hacer cálculos.