Al límite. Para correr diez kilómetros en 27 minutos tienes que vivir al límite. Para llegar a cada final de las olimpiadas debes esforzarte al límite. Estar en cada campeonato europeo exige respirar al límite. Alejandro Gómez ha competido entre los mejores fondistas del mundo. Siempre al límite. Entrenando una y otra vez. Cualquier hora es válida mientras consigas una buena marca. La exigencias en los entrenamientos diarios en atletismo pueden ser infinitas. Para tu cuerpo y más allá. Llevando dieta de atleta durante años. Embarcándose en temporadas con la exigencia puesta en el cronómetro. Llevando el cuerpo al límite. Sabiendo que aunque seas el mejor nunca podrás vivir del atletismo holgadamente. Soportando la presión de los medios de comunicación y las federaciones por conseguir trofeos. Y al mismo tiempo mostrándote cercano con los corredores amateurs. Introduciendo el canicross. Abriendo el Burner.

De alevín habías corrido un kilómetro en tres minutos en la pista de ceniza. Que tenía telita aquella pista. Y a partir de ahí no paraste. Más y más rápido. Como solo puede correr el galgo de Zamáns.