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tribuna del lector

La libertad

La libertad ha sido el logro más importante del ser humano. Muchos han muerto por conseguirla. La lucha por la libertad viene de lejos. Espartaco puede ser un símbolo en el tiempo de los romanos, pero la libertad sin verdad no tiene sentido. Jesucristo ya en su Evangelio nos decía: "La verdad os hará libres".

La verdad en nuestra convivencia es ser fiel a nuestros compromisos: ser fiel a nuestro compromiso en el matrimonio, ser fiel con nuestros hijos y ser fiel con nuestros amigos, no permitiendo que nadie hable mal de ellos en su ausencia.

A las nuevas generaciones les cuesta mucho mantener compromisos, o lo que es peor? nunca se comprometen.

El compromiso es el armazón fundamental de la felicidad a la que todos aspiramos, es la base de la confianza y, si reflexionamos, sin confianza este mundo es un infierno, pues viviremos en la incertidumbre y en la desconfianza.

Pero la libertad más importante es la que los estados o gobiernos tienen que ejercitar con los ciudadanos, respetando su interior y su pensar.

Por eso nos parece un ataque a la libertad cuando de alguna forma quieren cargarse la enseñanza concertada o la educación diferenciada.

Nos parece una barbaridad la permisividad en la ley del aborto que, aparte de saltarse a la torera el "No matarás", hace que nazcan menos niños y se ponga en peligro la sostenibilidad de las jubilaciones.

Los gobiernos atacan la libertad cuando nos hablan de muerte digna, propiciando una muerte al paciente en vez de aplicarle cuidados paliativos que alivien el dolor y tengan una verdadera muerte digna.

Es curioso que los que mandan hayan cambiado el mensaje. Hace años se cuidaba mucho el sexto mandamiento, todo lo relacionado con el sexo. Ahora nos invitan a los ciudadanos a ser permisivos con el quinto mandamiento "No matarás", despenalizando el aborto y su muerte digna. Nos vemos los mayores que, como no producimos, será mas rentable que se nos aplique una inyección letal y al cementerio.

Uno de los grandes problemas de este país es la sostenibilidad de las pensiones. Existe una falta de realismo y, de verdad, cuando era niño la mayoría de los españoles empezaban a trabajar a los catorce años y se jubilaban a los sesenta y cinco. Hoy la jubilación sigue a los sesenta y cinco pero la edad de empezar a trabajar es una media de veintidós años. No salen los números, hay que coger el toro por los cuernos y decir la verdad al pueblo. Hace años el sistema de pensiones era sostenible, trabajaban toda la vida y cuando se jubilaban a los cinco o diez años se morían.

Hoy lo normal es vivir ochenta o noventa años; esto quiere decir que el Estado tiene que cubrir las pensiones en vez de cinco o diez años, veinticinco o treinta.

Los políticos están para resolver los problemas de los ciudadanos y no dar soluciones demagógicas como subir impuestos a los ricos. Los ricos, naturalmente, deben pagar más pero sin espantarlos porque se cambiarán de país y habremos aplicado el sistema de que para curar la rabia matamos al perro.

España es un gran país y merecemos unos políticos que tengan imaginación y dedicación para crear un clima de libertad y bienestar.

*Miembro del Club 55

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