A la extrema derecha alemana, como a la de otros países, le sientan bien Facebook y el resto de las redes sociales, donde pueden verter su basura sin que nadie ejerza funciones de verificación y control.
Le dio ya buen resultado al equipo de Donald Trump en las elecciones norteamericanas, y ahora los partidos de la derecha radical europea imitan sus métodos con la esperanza de arrastrar a un electorado vez más vulnerable a las mentiras.
Sucedió ya en Europa con el Brexit sin que a quienes engañaron tan burdamente a los electores se les ocurra pedir perdón. El pueblo ya habló, proclaman, sin que admitan haber mentido.
Y recurre a parecidos métodos Alternativa para Alemania, el partido que nació como oposición a la UE y al euro y que ha derivado luego hacia posiciones abiertamente xenófobas con el pretexto de la inmigración ilegal.
Como ocurre con otros partidos de extrema derecha, AfD , como se le conoce por sus siglas en alemán, campa a sus anchas en Facebook, donde, según algunos estudios, aporta hasta un 85 por ciento del total de mensajes políticos allí compartidos.
Se trata de mensajes simples, directos y la mayor de las veces mendaces los que se emiten del tipo de "Una cosa es segura: las fronteras no lo son", "Es hora de que arrebatarle a Bruselas sus juguetes", "Los sirios pueden traerse aquí a sus segundas mujeres" o "Quieren acabar con el coche particular".
Quienes urden esa propaganda engañosa saben que hay temas con los que llegar fácilmente no a la mente, sino a las tripas de los votantes como los que tienen que ver con la inmigración, sobre todo si se relaciona con la delincuencia.
Para Julia Ebner, experta en extremismo del Instituto para el Diálogo Estratégico de Londres, citada por el semanario Der Spiegel, el truco consiste en combinar imágenes potentes capaces de provocar ira en aquellos a quienes van dirigidas, que suelen ser los indecisos, con sucias campañas contra el adversario político.
Alternativa para Alemania se ha convertido así en el primer grupo político de ese país que utiliza básicamente Facebook para su proselitismo, en lo que se diferencia básicamente de los tradicionales como el socialdemócrata o los cristianodemócratas y cristianosociales bávaros.
Últimamente AfD ha encontrado también una mina de oro en la política medioambiental del Gobierno y, convencido o hipócritamente negacionista, se dedica a atacar a quienes advierten de las consecuencias del cambio climático.
Éste es percibido por los ciudadanos alemanes como el segundo mayor problema del país, inmediatamente por detrás de la inmigración y por delante de la vivienda o las pensiones, según indican las encuestas.
Y Alternativa para Alemania acusa a los ecologistas y a la izquierda d en general de intentar sembrar el pánico en la ciudadanía, pintando el más negro panorama de futuro por culpa del descontrol de las emisiones de gases de CO2.
En las zonas rurales del país, donde muchas veces hace falta el coche para todo, AfD se presenta a los ciudadanos como el único partido que quiere salvar el diesel frente a los que solo buscan meter la mano en el bolsillo a los ciudadanos.
Y lo hace con mensajes como el incluido en la campaña para las elecciones europeas según el cual el Gobierno quiere "expropiar a quienes tienen un coche con motor diesel" o acusando a Bruselas de querer "acabar con nuestra industria del automóvil".
Según informaciones del semanario Der Spiegel, AfD colabora estrechamente con el Instituto Europeo del Clima y la Energía, que en su portal de internet se refiere a la política medioambiental del Gobierno como un pretexto para "tutelar a la población y a las empresas" y "acribillar a impuestos a los ciudadanos".
Ese supuesto instituto está relacionado, según la primera cadena de la TV alemana, con la organización negacionista estadounidense Collegians for a Constructive Tomorrow (CFACT), que ha recibido a su vez importantes subvenciones de la perolera ExxonMobil.
Basta pinchar en el portal de internet de CFACT para encontrar mensajes como éste: "La representante Alexandria Ocasio-Cortez, el senador Bernie Sanders y las emisora como la CNN o la MSNBC quieren que os creáis que el mundo se va a acabar en doce años por culpa del cambio climático (?) y que el socialismo es la respuesta". ¡Sin comentarios!
