Malditos compañeros de viaje que tantos valores están matando y tanto daño causan en el mundo. Nos cuentan que se multiplicaron los millonarios, ¿a costa de qué? De robar y de explotar a los obreros, de trabajar puede que no. Por el dinero pasa todo lo malo. Porque algunos roban cuando no les hacía falta. Se cargaría, sabe Dios, a cuantos que hoy día pasan hambre. Nos raptan mujeres y niños. ¡El infierno en vida! Para ellos y sus familias.
Esos que tienen valor para arrastrar por la fuerza no merecen vivir. Y los que pagan por abusar de quien está, porque no puede escapar. Ustedes señores de la esclavitud y de la degradación humana, ¡ustedes no se merecen el aire que respiran! Por lo que tendrán que pasar sus víctimas, vete tú a saber.
¡El infierno en vida!
*Vecina de Cercio (Lalín)