Kiko Matamoros ya está en casa tras su operación de estética. Una vez más, el televisivo se ha sometido a un retoque para mejorar su imagen. El colaborador se retocó las orejas, eliminó las bolsas de los ojos, redujo sus párpados y matizó su frente. La última vez, según él por un problema respiratorio, pasó por el quirófano y aprovechó para hacerse algún retoque.

Ahora de nuevo no tenía ningún problema de salud que provocara que tuviera que ponerse en manos de los médicos, pero quiso verse ante el trance de ser intervenido para verse más joven y más guapo. Se ha sometido a un lifting para quitarse flacidez en la cara y en la bardilla, y de paso se ha quitado las ojeras y las bolsas de los ojos.

Días después, ha salido de la clínica en la que fue intervenido para regresar a su hogar y descansar allí con los suyos, sobre todo con Makoke que está atravesando un mal momento desde que se ha incorporado a Sálvame. Era imposible que no le esperase una legión de reporteros y fotógrafos, por lo que Matamoros decidió taparse todo lo que pudo para que no pudieran captar su rostro cambiado, nuevo y reformado.

PREGUNTA: ¿Has visto como han recibido a Makoke en Sálvame?

KM: Sí, ya os lo diré en su momento.

P: ¿Ganas de ver a tus compañeros?

KM: Ni ganas ni no ganas, ya contestaré. Muchas ganas no tengo pero ahora no estoy con mucho ánimo para contestar esas cosas, pero ya contestaré, que no se preocupe nadie.

P: ¿Qué tal está Makoke? ¿está contenta con su paso por Sálvame?

KM: Yo creo que tiene que estar orgullosa, sobre todo del apoyo que le está dando la gente en las redes sociales y de la gente que la quiere que lo ha vivido obviamente de una forma distinta a como lo han vivido otros.